Fernández Ordóñez propone a la CE reforzar la Unión Europea de Defensa

J. V. I. C. ENVIADOS ESPECIALES, La diplomacia española ha tomado una iniciativa para intentar promover una identidad europea de defensa y evitar que el único foro europeo competente en esa materia, la Unión Europea de Defensa (UEO), quede relegado a desempeñar tareas de coordinación fuera del Viejo Continente, como las que desarrolló durante la guerra del golfo Pérsico. El ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, enviará una carta a sus homólogos de la Comunidad Europea (CE) con una propuesta sobre el porvenir de la UEO.

Francia es, probablemente, el país cuyos puntos de vista son más cercanos a los españoles, y por eso el titular de Asuntos Exteriores eligió a su homólogo francés, Roland Dumas, para darle cuenta en primer lugar de la carta que a principios de semana remitirá a los ministros de Exteriores de CE. Dumas ha sido este fin de semana el anfitrión del undécimo seminario ministerial hispano-francés celebrado en su feudo electoral de Dordoña (suroeste de Francia), al que asistieron seis ministros franceses y cuatro españoles -Exteriores, Interior, Defensa y Agricultura-.La misiva de Fernández Ordóñez debería ser discutida en la reunión que los 18 ministros de Exteriores y de Defensa de la UEO celebrarán el próximo jueves en Luxemburgo, en lugar de París. La capital del Gran Ducado ha sido elegida por razones prácticas -al día siguiente empezará allí la cumbre de los jefes de Estado y de Gobierno de la CE- y políticas, para poner así de relieve la creciente vinculación de esta organización con la CE.

Fernández Ordóñez no fue muy locuaz sobre el contenido de su carta pero en su entorno se reconocía que España alberga el temor de que la rápida reorganización de la OTAN tras el deshielo en el Este y la guerra del Golfo acabe otorgando a la UEO el papel de coordinar operaciones europeas "fuera de zona". La OTAN se dedicaría, en cambio, a Europa.

La OTAN, al Viejo Continente

"Si las cosas siguen su curso tendríamos", comentaba un miembro del séquito de Fernández Ordóñez, "una organización europea que no defendería a Europa mientras una organización transatlántica como la OTAN quedaría encargada de la seguridad del Viejo Continente".

El 7 de junio, los ministros de Exteriores de la Alianza reconocieron, por primera vez, la emergencia de una identidad europea en materia de defensa, aunque precisaron que este fortalecimiento del papel de Europa no debía efectuarse en detrimento del vínculo transatlántico con EE UU. Iniciada en primavera la reforma de la OTAN, que conlleva la creación de una fuerza de despliegue rápido, debería quedar sellada el 7 y 8 de noviembre en la cumbre que sus líderes celebrarán en Roma.

Antes de esa fecha España pretende que no se restrinja el margen de maniobra d e una UEO a la que Fernández Ordóñez describió como una "organización de transición" que a largo plazo está llamada a fundirse en el seno de la CE. Por ese mismo motivo sugiere en su carta que las presidencias rotativas de la CE y de la UEO coincidan en la medida de lo posible.

"Nunca hemos sido tan claros", añadió el ministro, respecto del "relevante papel de la UEO para articular una identidad europea en materia de defensa. Hay que impulsar ese proceso". La postura de Fernández Ordóñez encierra una pequeña contradicción porque si la OTAN no ha quedado facultada para desempeñar misiones fuera de Europa es, en parte, a causa de la oposición de países como Francia y España.

Además de inaugurar el 9 de julio la primera comisaria conjunta en Le Perthus-La Jonquera, los titulares de Interior acordaron también promover su cooperación intercambiando periódicamente a funcionarios de ambos ministerios. La ministra de Asuntos Europeos, Elisabeth Guigou, hizo, por su parte, una encendida defensa de las medidas adoptadas por España para controlar los flujos de magrebíes en vísperas de su entrada, el martes, en el llamado Grupo de Schengen, integrado hasta ahora por los seis países fundadores de la CE. "Antes incluso de adherirse a la convención", dijo Guigou, "España ha instaurado el visado para los magrebíes". Anunció, por último, que París y Madrid firmarán en breve un acuerdo de readmisión de ilegales.