El silencio de Narcís Serra
Al vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, no se le conoce participación alguna en esta primera refriega entre el partido y el grupo parlamentario con el Gobierno. Todavía están inéditos los canales que el nuevo vicepresidente utilizará para coordinar la labor del partido y del Gobierno y de éste con el grupo parlamentario.En esta ocasión el presidente del Gobierno, Felipe González, ha tomado el asunto personalmente ya que detrás de la "nota de la presidencia del Gobierno" se supone que está el propio González. No es extrano que esto haya ocurrido así dado que las partes en conflicto han puesto por testigo al presidente del Goblerno. Desde el PSOE se invocó el nombre del secretario general para avalar el Plan de Viviendas dado que éste se había discutido en su presencia.
Desde el Ministerio de Economía y Hacienda se asegura que el ministro Carlos Solchaga tenía las bendiciones del presidente del Gobierno para poner serias objeciones a la propuesta del partido. Por último, el secretario de organización, Txiki Benegas, señaló, también por vía de una "nota", que la única opinión que consideraba autorizada era la del presidente. Así las cosas nadie invocó el nombre de Narcís Serra pero tampoco ha mostrado interés alguno en salir a la palestra haciendo gala de prudencia. En medios gubernamentales se afirma que la intermediación de Serra hubiera terminado de complicar las cosas al presuponer a Solchaga una especial hipersensibilidad a que el vicepresidente opine de Economía. Serra viajará esta semana a Extremadura en lo que será su primera intervención pública.
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