La vaca inmortal
El autor considera que tres líneas fundamentales del discurso del Gobierno hacen agua en su política de vivienda: la redistribución de la riqueza, la competitividad y la incorporación a Europa. Crear un parque público de suelo y vivienda en alquiler y derogar la ley Boyer, son algunas de las soluciones que propone a este grave problema.
Han sido decisiones políticas muy concretas del Ejecutivo PSOE, las que han perseguido un año tras otro aumentar las desigualdades sociales hasta dividir el país en dos: los que tienen vivienda o acceso a ella y los que ni lo uno ni lo otro. Los hechos lo demuestran; ha descendido la construcción de VPO del 60% al 17% de las viviendas totales construidas. La vivienda de alquiler ha caído al mínimo en su historia, desde 1985 con la ley Boyer del 17% al 11 % del total del parque nacional. Las viviendas de iniciativa pública casi desaparecen; estamos en el 3,6%. Los contratos indefinidos en Madrid no hay quien los firme, el 77,8% son sin prórroga. En1987-1989 suben anualmente los alquileres un 30% de media y las ventas casi un 40% en las ciudades. Dos millones de viviendas permanecen vacías, con la Constitución y la Ley del Suelo, que denuncian la especulación en el desván.La incorporación en Europa de los españoles avanza, pero sólo a las duras, no a las maduras; mientras en Europa el 40% de las viviendas son en alquiler, aqui estamos ya en el 1 l%; si allí la vivienda pública es el 30% - 40% del parque total, en España estamos en el 3,6%; si en Europa se rehabilita el 30%, aqui estamos en la mitad; si en los presupuestos de los países vecinos la vivienda ronda el 2,5%, en el reinado de Felipe vamos por el 0,7%.
La competitividad se busca como siempre apretando el cinturón a los débiles, pero mientras se promueve una economía especulativa; en 1988 sólo en Madrid se realizaron 100.000 operaciones inmobiliarias, 20.000 cubrían la demanda real, las otras 80.000 eran pura especulación, que no crean empleo, no invierten, no arriesgan, no crean riqueza y sólo aumentan la inflación, las plusvalías improductivas y la nula competitividad de la economía española. Sólo en el comercio, el 75% de la actividad se realiza en locales de alquiler, desangrándose empresarios, trabajadores y consumidores en beneficio de rentistas y especuladores.
Apuesta
La especulación ya ha dado sus cinco años de vacas gordas y sólo le restan muchos más de vacas flacas. Los Gobiernos liberalconservadores de Felípe González creyeron que la especulación era una vaca inmoral y apostaron muy fuerte por ella. Querían hacer más ricos a los ricos y más pobres a los pobres, a cambio de conservar para ellos y su partido la portería de la casa común de los pudientes.La Asociación de Inquilinos de Madrid apuesta por un giro social en la vivienda y propone:
1. Construcción de un parque público de suelo y vivienda en alquiler.
2. Derogación de la ley Boyer -ahora, Solchaga, Borrell- y vuelta a la contratación indefinida y subida IPC en los alquileres.
3. Gravamen a los propietarios de viviendas vacías en los impouestos y expropiación del suelo retenido.
4. Subsidio a los Inquilinos con ingresos inferiores a 2,5 veces el SMI.
Los grandes intereses inmobi liarios y el Gobierno han llevado a la vivienda al colapso. Ahora sólo la iniciativa pública y los promotores sociales pueden recuperar la vivienda y la ciudad para interés general y para ese 60% de familias demandantes en particular que se han quedado sin casa y sin futuro por las cuentas del Gran Liberal.
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