El Cesid ayudará a crear un servicio secreto en Chile

El vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, ofreció el lunes, en el almuerzo a la delegación chilena, ayuda para reestructurar los cuerpos de seguridad del Estado y, para mejorar la eficacia de la lacha contra un incipiente terrorismo de extrema izquierda. Pero lo que Serra no reveló es que, paralelamente, España se ha ofrecido para contribuir a la puesta en pie de un servicio de inteligencia, del que carece Chile, y con ese propósito viajará en breve a Santiago una delegación del Cesid (servicio secreto militar español).La antigua policía política, la temible Dina, que en los últimos años de la dictadura pasó a llamarse Central Nacional de! Inteligencia (CNI), ha sido disuelta Los tres ejércitos que componen las Fuerzas Armadas y los carabineros (Guardia Civil) disponen cada uno de una sección de inteligencia.

El Gobierno de Aylwin desea que, en una primera etapa, civiles leales a la democracia coordinen los servicios de cada arma y que, a más largo plazo, las labores de inteligencia que no guardan relación con asuntos castrenses sean desempeñados mayoritariamente por civiles.

Para llevar a cabo este proyecto, el Gobierno democrático difícilmente podía echar mano de la CIA, norteamericana, comprometida con el derrocamiento de Salvador Allende y que goza de muy mala fama en Chile. Pero no deja de ser paradójico que el encargado de asesorarles en esta tarea sea el Cesid español, cuyos responsables son casi todos militares.

Mientras, el presidente chileno, Patricio Aylwin, se esforzó ayer, en la última jornada de su primera visita oficial a España, en demostrar que no hay motivos para "temer que los principios de la democracia puedan ser quebrantados" por las Fuerzas Armadas en su país. Aylwin reconoció, no obstante, que Chile es una democracia atípica, en la que "las instituciones armadas tienen un rol que no se corresponde con lo que a nuestro juicio debe ser un sistema plenamente democrático".

Aylwin hizo estas declaraciones en el palacio de El Pardo en una conferencia de prensa conjunta con el presidente Felipe González, quien, en contra de su costumbre con sus huéspedes extranjeros, estuvo poco locuaz. Sí expresó, no obstante, su confianza en el porvenir de Chile, un país que tiene "enormes ventajas comparativas" en relación con los de su entorno.