EE UU apoya una resolución de la ONU que condene a Irak por la represión civil

Estados Unidos es partidario, junto con Francia, Alemania y Turquía, de que el Consejo de Seguridad de la ONU -cuyos 15 miembros iniciaron ayer consultas informales sobre este asunto- adopte una resolución, con mayor fuerza legal que una simple declaración, que condene a Irak por la forma en que reprime la revuelta popular de kurdos y shiíes contra el régimen de Sadam Husein.

Con esta toma de posición de Washington coincidió una declaración del Departamento de Estado, que aseguró que Sadam controla la totalidad de las principales ciudades insurgentes y tan sólo quedan enfrentamientos esporádicos entre los rebeldes y el tropas regulares iraquíes.La nueva actividad en los pasillos de la organización internacional se produce 24 horas después de que el Consejo de Seguridad aprobara por 12 votos a favor, 1 en contra, el de Cuba, y 2 abstenciones, las de Ecuador y Yemen, una compleja resolución imponiendo a Irak una serie de condiciones para poner fin oficialmente a la guerra del Golfo.

La resolución, calificada por. el embajador iraquí en la ONU, Abdul Amir al Anbari, de "violación escandalosa de la Carta de las Naciones Unidas", exige a Irak la destrucción de su arsenal químico, biológico y nuclear, crea un fondo de reparaciones de guerra para compensar a Kuwait por la invasión y obliga a Bagdad a aceptar los límites con el emirato fijados en 1963.

No hay precedentes de que el Consejo de Seguridad se convierta en un garante de fronteras", protestó el embajador iraquí. Una negativa iraquí a aceptar las condiciones de la resolución supondría, en el mejor de los casos, la continuación de las sanciones económicas y, en el peor, la continuación de las hostilidades.

Entretanto, influyentes congresistas atacaron ayer al presidente George Bush por su política de lavarse las manos en la revuelta interior iraquí después de haber pedido públicamente a la población de Irak el derrocamiento de Sadam Husein. Bush reiteró el miércoles su intención de no involucrar a las fuerzas norteamericanas en lo que calificó de "asuntos internos" de Irak. "Nuestras fuerzas han hecho su trabajo y no pienso comprometerlas en una lucha secular", dijo Bush en una referencia a las aspiraciones autonomistas de la minoría kurda.

El congresista republicano Gary Ackerman acusó al presidente de abandonar a los kurdos después de haberlos -alentado a sublevarse contra Sadam Husein". Por su parte, el senador demócrata por Tennessee, Albert Gore, que votó.a favor del empleo de la fuerza en el debate previo al comienzo de las hostillades, declaró que no era "justo permanecer con las manos cruzadas mientras los kurdos y otras minorías están siendo sacrificados".

Otros senadores han pedido al presidente que autorice a la aviación norteamericana desplegada en la zona del Golfo a atacar a los helicópteros y blindados utilizados por las fuerzas leales a Sadam Husein contra los rebeldes.

[Por otra parte, el general Colin Powell afirmó ayer que una vez adoptado el alto el fuego por la ONU, las tropas de EE UU destacadas en el Golfo pueden tardar en ser repatriadas alrededor de un mes, informa Reuter.]