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Ana Belen estrena su primera película como directora y dice no "arrepentirse"

"El lado bueno es la expectación, y el lado malo, la exigencia"

Anoche tuvo lugar en Madrid la primera proyección pública -hoy se estrena en otras ciudades españolas- del debú como directora de cine de Ana Belén: Cómo ser una mujer y no morir en el intento, basada en el libro del mismo título escrito por Carmen Rico Godoy y protagonizada por Carmen Maura y Antonio Resines. La famosa actriz, hoy directora, se declara "consciente" de que la crítica no la va a tratar como a cualquier director novel, pero, dice, "no me arrepiento y estoy satisfecha, al margen de lo que venga".

La historia de cómo la actriz Ana Belén se ha convertido en directora y no ha "muerto" en el intento -según explica ella misma, jugueteando con el título de la película- es propiamente una historia de cine y relativamente habitual.El estreno anoche en un cine de Madrid, al que se asistía por invitación, estuvo abarrotado, con la asistencia, entre otros, del nuevo ministro de Cultura, Jordi Solé Tura, la actriz Aitana Sánchez Gijón, la abogada Cristina Almeida, el director Fernando Trueba y los protagonistas de la película, los actores Carmen Maura y Antonio Resines.

Esposo y director

Una novela lúcidamente divertida y realista, obra de la periodista Carmen Rico Godoy, que pone a los hombres a caldo en su comportamiento cotidiano con las mujeres se convierte en un espectacular éxito de ventas.

Entonces, un productor -por cierto, que en la vida real es esposo de la escritora lo que no deja de tener su gracia, que figura ácidamente retratado en el libro- se propone conseguir lo mismo pero en el cine, o sea, lograr un éxito cinematográfico y, como la historia va de mujeres, se le ocurre que tendrá más gancho si la dirige una mujer famosa, encima una actriz que debuta como directora: Ana Belén.

"El lado bueno de ser Ana Belén -dice ella antes del estreno- es ése, que me hayan ofrecido dirigir por la curiosidad y expectación que pueda provocar a los espectadores mi nombre como directora. El lado malo es que me exigirán de otra manera que a un debutante. Pero yo lo asumo y lo acepté porque sentí que era como abrir una pequeña puerta en otra dlrección que, quién sabe, tal vez continúe en un lejano futuro".

La experiencia ha sido para ella "muy buena y me siento bien y contenta de haberlo 'hecho", declara. "Yo no puedo ser objetiva sobre cómo me ha quedado la película pero creo que es una comedia ácida que está bien rodada, bien montada y que se entiende".

Las reflexiones que hace Ana Belén sobre la experiencia de dirigir son varias. "He dirigido esta película pero no me siento directora de cine porque, fundamentalmente me sigo sintiendo actriz y, además, he procurado que fuera algo en equipo. Luego, he descubierto que ser directora da más trabajo que ser actriz y es, mucho menos gratificante, porque no se acaba nunca y no tienes el premio de sentir al personaje cuando lo interpretas".

Aterrada

Tranquila aunque "aterrada" porque hasta anoche, explica, "nadie ha visto la copia final del filme, ni siquiera yo". Ana Belén dice que sus proyectos más inmediatos no pasan por el cine sino por la música.

"A la vez que montaba la película he hecho un disco que saldrá dentro de dos semanas y luego daré recitales porque quiero sentir el contacto con el público", dice Ana Belén. "Tengo una ventaja: mi falta de ambiciones a la vez que puedo cantar e interpretar. ¿Dirigir algo mío? Tal vez en el futuro. Después de los recitales, volver a ser actriz".

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