García Valverde afirma que no llega a Sanidad con "criterios economicistas"

Julián García Valverde, tercer ministro socialista de Sanidad y Consumo, manifestó ayer durante su toma de posesión que no piensa aplicar "planteamientos economicistas" en su gestión. Esta ha sido una de las críticas más frecuentes realizadas a Julián García Vargas, su antecesor en el departamento, por profesionales sanitarios y consumidores. García Valverde se encontró en su primera jornada como ministro una huelga de médicos internos y residentes.

Con esa declaración de intenciones Julián García Valverde salía al paso del recelo que provoca sistemáticamente en médicos y enfermeros el hecho de que Felipe González elija como ministros de sanidad a hombres que proceden de sectores económicos. La situación a la que se enfrenta el nuevo gestor sanitario es similar a la que tuvo que afrontar en 1987 Julián García Vargas: tensión y descontento entre los profesionales sanitarios y largas listas de espera para recibir asistencia hospitalaria.Varias fuentes consultadas justifican lo poco que se ha modificado los últimos cuatro años el panorama sanitario, en el hecho de que la gestión de García Vargas ha estado hipotecada por la huelga de médicos que paralizó los hospitales públicos al principio de su mandato. Previamente a este conflicto, García Vargas había situado sus objetivos prioritarios en la mejora de la atención primaria, reducción de las listas de espera y desarrollo de la Ley General de Sanidad.

El sindicato de enfermería SATSE ha considerado bueno el cambio ya que a su juicio se necesita la entrada de un hombre "nuevo que sea capaz de cambiar la política sanitaria imperante y acabar con los parcheos".

Julián García Valverde se encuentra también pendiente la definición de la lista de prestaciones que cubrirá la Seguridad Social. En esta medida, anunciada por García Vargas para este año, está incluída la llamada lista negra de medicamentos (fármacos excluidos de receta). Fuentes de la Dirección General de Farmacia manifestaron a EL PAÍS que esta medida "no será aparcada por el relevo al frente del ministerio. La decisión de establecer listas negras cierra los instrumentos jurídicos en materia de política farmaceútica y saldrá adelante porque se trata de un tema de gobierno que trasciende más allá de la persona que esté al frente del ministerio".

Quizás, el único aspecto en el que Julián García Valverde parte con ventaja con respecto a García Vargas sea el de los presupuestos destinados a Sanidad. En este sentido, varias fuentes del sector concedieron especial importancia a la presencia de Solchaga en la toma de posesión del nuevo ministro. De hecho, el gobierno ha aumentado progresivamente la partida de dinero destinada a la asisistencia sanitaria. García Valverde ha de gestionar este año 2,1 billones de pesetas, el 13,92% más, que en 1990, aunque no hay que olvidar esta cantidad sigue siendo de las más bajas de los países de la CE.

Huelga de los MIR

El 95% de los médicos internos y residentes (MIR), según los convocantes, -el 70% según el Ministerio de Sanidad- secundaron ayer la segunda jornada de paro convocada por la Coordinadora Estatal de Facultativos Internos y Residentes (CEFIR), informa Servimedia. Los MIR no cubrieron los servicios mínimos establecidos en los hospitales, en los 72 centros afectados por el paro. Los médicos reclaman una subida de 30.000 pesetas. Sus reivindicaciones serán abordadas en la mesa sectorial de Sanidad, informa Efe, en la que están todos los sindicatos representativos del sector, según el director general de servicios del departamento, Luis Herrero.