El Inclusero tardará mes y medio en reaparecer
Gregorio Tébar El Inclusero, cogido cuando lanceaba de capa al primer toro en la corrida inaugural de la temporada de Las Ventas, tardará, por lo menos, mes y medio en volver a los ruedos, como consecuencia de las lesiones que sufrió, según han nafiestado los médicos que le atienden. Tras el percance fue asistido en la enfermería de fracturas, contusiones y enfisema subcutáneo, de pronóstico reservado, pendiente de examen radiológico. Tras este estudio radiológicó, efectuado ayer, se pudo comprobar que el torero sufre la rotura de cuatro costillas, además del enfisema, todo en el hemitórax izquierdo, a consecuencia de los pisotones y varetazos que le propinó el toro."Gregorio pasó una noche malísima después de la cogida", declaró su esposa, Isabel, "continuamente mareado y sin poder respirar". Y añadió: "Los médicos han dicho que tardará por lo menos mes y medio en volver a torear. Es el colmo de la mala suerte. Le han aconsejado que se levante para estar sentado en un sillón, pero lo pasa fatal. No sabe cómo ponerse, Y aquí estamos, esperando a que transcurran unas cuantas horas, para que se quede más tranquilo".
"Apenas pudimos cruzar unas palabras en toda la noche del domingo al lunes. Y lo poco que me dijo", continuó manifestando la esposa de El Inclusero, "fue para quejarse de su mala suerte. Antes, porque había caído en un olvido injusto por parte de las empresas, y ahora porque esta cogida le va a retrasar la rentabilidad de su éxito el año pasado en Madrid, donde cortó la última oreja de la temporada. No obstante, insiste en que no se viene abajo, convencido de que, tarde o temprano, llegará también su buena estrella". ,
El Inclusero recibió al primer toro de la corrida del domingo en Las Ventas, de Jiménez Pasquau, con lances a la verónica, y había instrumentado dos cuando sufrió una torcedura de tobillo y cayó al suelo. Aunque en un principio pudo hacerse él mismo el quite, en la siguiente embestida el toro le arrolló, comeándole y pisoteándole.
Dos orejas en Castellón
Vicente Ruiz El Soro y Francisco José Ruiz Espartaco Chico cortaron sendas orejas en la segunda corrida de la Feria de La Magdalena, de Castellón, celebrada ayer, con tres cuartos de entrada, en tarde nublada y fría.Se lidiaron cinco toros de Mari Carmen Camacho, discretamente presentados, nobles e inválidos, y un sobrero -cuarto- de Joaquín Barral, inválido también. José Luis Parada tuvo silencio en su lote; El Soro, oreja y palmas, y Espartaco Chico, vuelta tras un aviso y oreja tras otro aviso.
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