La guerra y la tentación de mirar a otro lado
, Varios miembros del Gobierno, en particular algunos de los que han participado más directamente en el seguimiento de la guerra en el golfo Pérsico, han expresado en conversaciones privadas su descontento con la pasividad mantenida por otros miembros del Gabinete y de dirigentes de la ejecutiva federal del PSOE. Uno de los ministros integrantes del mini-gabinete de crisis ha llegado a telefonear, con conocimiento de Felipe González, a un compañero del Consejo para sugerirle que en la siguiente ocasión en que un periodista le pregunte por el conflicto bélico apoye con fuerza la posición del Gobierno, en vez de inhibirse con disculpas formales.Dos altos cargos gubernamentales que han defendido públicamente el apoyo logístico a las fuerzas multinacionales han lamentado la ausencia de respaldo desde el PSOE, y en particular de los intelectuales que podían haber contribuido a explicar razonadamente la respuesta occidental a la invasión de Kuwait. Según un dirigente socialista, cuando en una reciente reunión de la ejecutiva federal un asistente apeló a la conveniencia de prestar más apoyo al Gobierno, la secretaria de relaciones internacionales, Elena Flores, replicó que ya había sido enviada una circular a las ejecutivas provinciales.
Fuentes gubernamentales aseguran que Txiki Benegas, secretario de organización, fue animado desde el Gobierno a comparecer en una rueda de prensa, como lo hizo el pasado día 5 de febrero, para justificar las tesis del Gobierno.
El comportamiento concreto del propio Gabinete no ha estado tampoco exento de errores, según reconocen algunos ministros. Según un miembro del Gabinete, la incompleta versión oficiosa de la carta enviada por Felipe González a Gegorge Bush forzó al presidente del Gobierno español a una improvisada conferencia de prensa, destinada a subrayar el mantenimiento de todo el apoyo logístico hasta la retirada iraquí de Kuwalt. La sugerencia del cese del bombardeo de Bagdad había suscitado dudas sobre una posible limitación del uso de las bases españolas por los B-52.
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