Ultima tentativa
EL MINISTRO de Exteriores iraquí, Tarek Aziz, salió ayer de Moscú, en un avión especial soviético, con un plan de paz" en el bolsillo, con el compromiso de que Sadam Husein dará en un plazo breve una respuesta definitiva. Aunque el portavoz del presidente de la URSS no ha dado datos concretos sobre el contenido del plan presentado por Mijaíl Gorbachov, se sabe que en él hay dos puntos fundamentales, que corresponden a lo que ha sido la actitud de la URSS en el conflicto del Golfo: primero, la demanda tajante de que las trorias iraquíes se retiren de Kuwait sin condiciones. Y a la vez, la idea de que conviene examinar, una vez que la guerra haya terminado, todos los problemas de la región, y entre otros, el palestino. Diversos hechos, como la actitud "constructiva" -según han dicho los soviéticos- de Tarek Aziz durante la conversación en que Gorbachov le presentó su proyecto, permiten pensar que el viraje iniciado por Irak con el comunicado del Mando de la Revolución del pasado 15 (te febrero es más profundo de lo que en un principio se había creído.Este comunicado fue duramente criticado -Bush lo calificó de "broma cruel"-, ya que en él la aceptación de la resolución 660 de la ONU (con la retirada de Kuwait) aparecía condicionada a una serie de puntos absolutamente inaceptables. Pero, en Moscú, Aziz ha dicho que esos puntos no son condiciones, sino un programa para ser estudiado o discutido después de la retirada de Kuwait. Se trata de un cambio radical: lo Inaceptable como condición previa puede, en cambio., entrar perfectamente en las discusiones que deberán seguir al cese de las hostilidades. Por diversas razones -y sin duda, en gran parte, por los daños sufridos y por la amenaza de una ofensiva terrestre-, Irak se halla hoy en una situación gravísima. El hecho mismo de haber aceptado el principio de la retirada de Kuwalt es un factor de tremenda desmoralización para las tropas iraquíes atrincheradas para defénder ese país. ¿Cómo pedir a un soldado que dé la vida para defender algo que su propio Gobierno está ya disipuesto a abandonar?
Aún no han sido desveladas muchas de las cartas de esta corapleja negociación diplomática en Moscú, Teherán y otras capitales, pero de, ella puede salir una aceleración del final de la guerra. Es obvio que Gorbachov, tanto por la presión interior a la que está sometido por sectores civiles y militares como por el deseo de asegurarse un papel en los arreglos futuros de la zona -tan próxima a la URSS-, tenía'un interés muy especial en realizar este último esfuerzo. Pero no ha actuado solo: ha estado en contacto estrecho con diversos Gobiernos, con EE UU y con otros países, particularmente europeos, en esta negociación.
En todo caso, la guerra parece atravesar un momento de cambio. Lo ayer inimaginable, que Sadam Husein acabe por aceptar retirarse de Kuwait, es una posibílidad que no puede descartarse. En esta coyuntura, EE UU y los otros países de la fuerza multinacional deben aplazar la ofensiva terrestre que está a punto de comenzar, al menos hasta que se aclare definitivamente si Irak se somete a las decisiones de la ONU.
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