Desertores de Bilbao y Pamplona se presentarán mañana ante la justicia militar

Dos desertores al servicio militar, Asier Sánchez Garmendia, quien abandonó el 15 de enero su destino en la fragata Asturias, y Santiago Quiroga, quien dejó su acuartelamiento en Melilla cuando le faltaban cuatro meses para terminar la mili, anunciaron ayer su intención de presentarse mañana ante la justicia militar.Sánchez Garmendia, natural de Santurtzi (Vizcaya), manifestó ayer a EL PAÍS que se presentará mañana ante el Gobierno Militar de Vizcaya. "Empezaron a cargar misiles en la fragata. Luego nos empezaron a repartir trajes antifuego y máscaras antigás. Cuando preguntamos para qué era todo aquello, nos dijeron que nos mandaban a unas maniobras de la OTAN en el Mediterráneo. Oí a unos mandos decir que nos íbamos a Turquia y me marché. Para mí la guerra no tiene sentido", manifestó.

El otro desertor, Santiago Quiroga, natural de Pamplona, hizo pública en una conferencia de prensa su intención de presentarse mañana ante el juez militar de Navarra.

Por otra parte, el Secretario de Estado para la Administración Militar, Gustavo Suárez Pertierra, declaró ayer a este periódico que es "contrario" a una eventual ampliación de la Ley de Objeción de Conciencia que recogiera la objeción sobrevenida, es decir la que se realiza durante el cumplimiento del servicio militar. El Código Penal militar equipara esta figura al delito de deserción.

"Incorporar la objeción sobrevenida como supuesto de exención equivaldría a legitimar la deserción", manifestó Suárez Pertierra. El secretario de Estado para la Administración Militar recalcó que la futura reducción del tiempo de mili a nueve meses "no se verá retrasada por la guerra del Golfo", y consideró "lógico" que esa reducción vaya acompañada de "una disminución proporcional del tiempo del servicio civil de los objetores".