Irak gasta en Moscú su último 'cartucho' diplomático
El presidente de la URSS, Mijaíl Gorbachov, insistirá en la retirada de las tropas iraquíes de Kuwait y explorará la disposición de Bagdad a ponerla en práctica cuando se reúna hoy con el ministro de Exteriores iraquí, Tarek Aziz, en lo que parece la última oportunidad de evitar la ofensiva terrestre en la guerra del Golfo. El jefe de la diplomacia iraquí llegó anoche a Moscú desde Teherán, donde se entrevistó con su homólogo iraní, Alí Akbar Velayati.
Antes de salir de Teherán Azíz se refirió a la resolución 660 de las Naciones Unidas, en la que se exige a Irak la retirada incondicional de Kuwait. Dijo que la declaración del día 15 del Consejo Revolucionario iraquí, que ofrecía una retirada condicionada, es clara y constituye un primer paso por parte de Irak; ahora corresponde al otro lado mostrar buena voluntad".
"Estados Unidos quiere continuar su agresión y dominación del área, en contra de lo que dice", añadió Aziz, "y por eso no quiere cumplir las resoluciones de la ONU". "Si Estados Un¡ olos", añadió, no toma en consideración las demandas internacionales, no tenemos más alternativas que continuar nuestra lucha, y esperamos que otros países apoyen a Irak". Respecto a la posibilidad de que Irak utilice armas químicas si comienza la batalla terrestre, Aziz respondió a los periodistas: "Los diplomáticos no hablan de esas cosas, eso preguntenlo a los militares". También declaró que su visita a Teherán no era una simple escala de camino a Moscú: "Yo tenía interés en discutir varios asuntos con mi colega Alí Akbar Velayati, y a mi regreso de Moscú volveré a discutir con él de nuevo".
Ante las decisivas reuniones de hoy en Moscú, los represen su propósito de insistir en la retirada de Irak a la troika de la Comunidad Europea, formada por los ministros de Exteriores de Luxemburgo, Italia y Holanda, Jacques Poos, Gianni de Michelis y Hans van Der Broek, respectivamente.
La troika se entrevistó el sábado con Gorbachov y con el ministro de Exteriores, Alexandr Besmértnij. La reunión sirvió para "esclarecer la concordancia de las posiciones de la URSS y la CE en el sentido de que co:)rresponde a Irak dar todos los pasos", manifestó De Michelis.
Compensaciones
El ministro italiano informó también de la entrega de un mensaje de la CE "sobre la retirada incondicional" a los representantes soviéticos para que éstos lo hagan llegar por los canales adecuados a los iraquíes. El ministro de Exteriores luxemburgués esperaba que fuese posible convencer a Irak de que renuncie a las condiciones que vinculan la retirada con el conflicto árabe-israelí y compensaciones materiales. Vitafl Churkin, el portavoz del Ministerio de Exteriores soviético, dijo el sábado que las condiciones establecidas por Irak para retirarse de Kuwait podían invalidar su oferta.
La reunión entre el presidente soviético y la troika duró más de dos horas y fue calificado como 11 positiva", "constructiva" y "muy completa" por el jefe de la diplomacia italiana. Uno de los temas tratados fue la necesidad de elaborar un sistema de seguridad posbélica eficaz para la región de Oriente Próximo.
Para la URSS, el viaje de Tarek Aziz a Moscú no es sólo una ocasión de hacer valer su influencia sobre Bagdad en pro del fin del conflicto. Es también una ocasión de consolidar posiciones en el mundo árabe cuando acabe la guerra. Ésta es la tesis que mantenía el corresponsal diplomático de Izvestia, M. losin, en un comentario publicado con ocasión de la visita de Aziz.
Paralelamente, Moscú aspira a no sobrepasar el límite tras el cual los gestos hacia Irak pueden ser acogidos "negativamente" por Occidente e influir en las relaciones entre Moscú y Washington y sus aliados en el conflicto. Por el momento, la Unión Soviética está consiguiendo mantener este díficil equilibrio, opina el comentarista.
