Leal considera la regularilzación "técnicamente buena"

El presidente de la Asociación Española de la Banca Privada (AEB) declaró ayer en Barcelona que la regularización fiscal anunciada por el Gobierno es "una salida técnicamente buena" para los poseedores de pagarés del Tesoro. "Es una salida interesante y positiva", señaló el máximo dirigente de la patronal bancaria, quien sin embargo no quiso pronunciarse sobre las posibilidades de éxito de este proyecto hasta conocer la reglamentación final del mismo.Leal, quien hasta ahora no se había pronunciado sobre el proyecte) regularizador proyectado por Economía, hizo estas declaraciones en una conferencia de prensa posterior a la inauguración del seminario Nuevos centros financieros europeos. Leal no quiso pronunciarse sobre las bondades de Barcelona como ciudad candidata a ser sede del futuro Banco Central Europeo, dada la competencia existente sobre este aspecto con otra ciudad española, Valencia.

José Luis Leal no quiso tampoco pronunciarse sobre el anuncio de que próximamente los talones al portador no podrán exceder de terminada cantidad de dinero porque "hay que esperar la propuesta exacta", aunque advirtió que "toda propuesta tendente a limitar el tráfico comercial creará más problemas a los usuarios".

El presidente de la AEB, en su intervención ante los asistentes al seminario, hizo votos por "la limitación del déficit de las Administraciones públicas, tanto centrales como autónomas y locales", como un aspecto fundamental para poder crear "un entorno de política monetaria diferente del actual y unos tipos de interés orientados a la baja", ya que ello permitiría una reducción rápida de los coeficientes. En este sentido, Leal recordó que los coeficientes "son una forma en cubierta de recaudar impuestos"

"Una de las condiciones para pasar a la segunda etapa de la unión monetaria consiste, precisamente, en la renuncia por parte de los Estados a la financiación en condiciones privilegiadas de sus déficit. La última reforma de hace apenas un año", se lamentó Leal, "suprimió la mayor parte de los coeficientes para los aumentos de pasivo, que desde entonces sólo se han visto sometidos al de caja. Esta medida ha creado una solución peculiar, ya que las nuevas entidades que se han instalado en España a partir de entonces se encuentran sometidas a unos coeficientes mucho más bajos que las entidades anteriormente establecidas, por lo que se produce una discriminación negativa de éstas últimas".