La informática no vale como prueba

El Comité Internacional de la Cruz Roja ha enviado un documento a los estados involucrados en la guerra del Golfo en el que menciona la necesidad de que las fichas de captura, de acuerdo con la Convención de Ginebra, han de ser rellenadas a mano y no mediante sistemas informáticos, ya que las fichas han de ser una prueba irrefutable de la existencia y del paradero último del detenido. En el documento se incluye una transcripción fonética de la lista de los nombres iraquíes más usuales con el fin de facilitar el trabajo. Algunos de los datos que aparecen en las fichas a rellenar por los detenidos son, además de los personales, el día y el lugar del arresto, la sentencia, si la hubiere, y la autoridad que efectuó la detención.La Convención de Ginebra sobre el trato a los prisioneros de guerra, firmada el 12 de agosto de 1949, es un compromiso de respeto en una. serie de normas a seguir, de acuerdo a los derechos humanos, con los militares y civiles apresados en tiempos de guerra. A tal efecto quedan prohibidos los atentados a la vida y a la integridad corporal, la toma de rehenes, los atentados a la dignidad personal, en especial los tratos humillantes y degradantes, y las sentencias de ejecución sin juicio previo. Establece que un organismo humanitario imparcial, como la Cruz Roja, puede ofrecer sus servicios a las partes en conflicto para proteger a los prisioneros de guerra.

Según el Artículo 14, los prisioneros de guerra tienen derecho en todas las circunstancias al respeto de su persona y de su dignidad. Según el Artículo 17, el prisionero de guerra "no tendrá obligación de declarar" más que su nombre, graduación, fecha de nacimiento y número de matrícula, y no podrá ser ejercida "ni tortura física o moral ni ninguna presión para obtener de ellos informes de cualquier clase que sean. ( ... ) Los cautivos que se nieguen a obedecer no podrán ser amenazados, ni insultados, ni expuestos a molestias ni desventajas de cualquier naturaleza". A partir del Artículo 19 establece una serie de normas, entre las que se incluye que los cautivos deberán ser evacuados lo más brevemente posible hacia campos alejados de la zona de combate.