Baker se reúne con los embajadores de Israel, Egipto, Siria y Arabia Saudí

El secretario de Estado norteamericano, James Baker, se reunió ayer (a las 3,30 hora peninsular española) con los embajadores de Egipto, Israel, Arabia Saudi y Siria en Washington para evaluar la situación después del ataque iraquí contra territorio israelí. Inmediatamente después, Baker se trasladó a la Casa Blanea para informar al presidente Bush y sus asesores, de la tratado y analizar el nuevo rumbo de los acontecimientos.El Departamento de Defensa norteamericano confirmó anoche que al menos ocho misiles Scud habían caído en la ciudad de Tel Aviv y sus alrededores. Los misiles Seud tienen un alcance de 300 kilómetros y pueden transportar cabezas con carga convencional, química o nuclear.

Un portavoz oficial israelí confirmó a la cadena de televisión ABC que poco después del ataque habían comenzado a recibir asistencia algunas personas con síntomas de asfixia, lo que confirmaba que la carga de los misiles iraquíes portaba material químico. Según informaron las cadenas de televisión norteamericanas, se temía una rápida y devastadora reacción militar israelí. Un portavoz del Departamento de Estado, que pidió no ser identificado, dijo que Washington y Tel Aviv estaban en contacto permanente evaluando la dimensión del ataque iraquí. "Israel tiene derecho a defenderse", dijo el mismo portavoz, dando a entender que Estados Unidos aceptaría la inminencia de la entrada israelí en la guerra.

Las noticias del ataque iraquí contra Tel Aviv y sus alrededores fue acogida con sorpresa y conmoción en Washington, donde n se esperaba que las fuerzas .raquíes pudieran llevar a cabo la reiterada amenaza de Sadam de atacar a Israel.