El Patronato de las Tablas de Daimiel exige la derivación de caudales hacia el parque

Los 24 miembros del Patronato del parque nacional de las Tablas de Daimiel (Ciudad Real) han suscrito por primera vez en su historia un plan de siete puntos con el fin de salvar a este espacio natural protegido de la sequía que le amenaza. El patronato considera que la derivación de caudales a partir del trasvase Tajo-Segura, por el río Cigüela, es la "única fómula para mantener a las Tablas en unos niveles mínimos de agua aceptables de cara a su conservación".

El patronato del parque, cuyo actual presidente es Fernando López Carrasco, consejero de Agricultura de Castilla-La Mancha, ha decidido asimismo solicitar al Consejo de Ministros la urgente renovación de la ley trianual que permitió esta medida de emergencia en 1987. Mientras esto no ocurra, explica Miguel Ángel Hernández, de la Federación de Amigos de la Tierra (FAT), "este humedal de importancia internacional continuará prácticamente en seco, con sólo 70 de sus 2.000 hectáreas encharcadas".Según confirma Carlos Martín Novella, de la Sociedad Española de Ornitología (SEO) y asesor de la Comunidad Europea en temas medioambientales, "este hecho está a punto (le causar graves repercusiones faunísticas internacionales", ya que múltiples aves migratorias, procedentes del norte de Europa, "han tenido que buscarse este año otros lugares de invernada fuera de Dalmiel". Toda esta avifauna aparece dispersa en estos momentos por otras pequeñas zonas húmedas manchegas, "carentes de toda protección, donde están sufriendo importantes bajas a manos de los cazadores".

Para María Jesús Sánchez Soler, directora conservadora del parque, "únicamente garzas y patos reales subsisten dentro del parque, más un centenar de grullas que campea por los encinares próximos". Pero apenas se han contabilizado este año los patos colorados, una espejie tradicional en el área, cuya supervivencia europea depende en buena parte de un Daimiel convenientemente encharcado.

En la última reunión del patronato de las Tablas, que tuvo lugar el pasado día 7 en el propio centro del parqae nacional, también se destacó "la necesidad de declarar oficialmente sobreexplotado el acuífero 23 manchego". Según cifras avaladas por el propio comisario de Aguas del Guadiana, Domingo Rubio, en 1990 el nivel de este acuífero ha descendido todavía más, entre uno y dos metros. Estos datos hidráulicos, cada vez más alarmantes, han impulsado a solicitar- un Programa de Recuperación de los Acuíferos de La Mancha, "como único modo de asegurar la regeneración efectiva y real de los ecosistemas húmedos de esta comarca en vías de extenuación hídrica".

Reconversión agrícola

Miguel Sánchez, de la Cámara Agraria dalmieleña, y otros repesentantes de las organizaciones agrarias manchegas manifestaron incluso su acuerdo en este punto, declarándose a favor de una reconversión agrícola comarcal, aunque siempre que no haya que correr con los costes.El presupuesto presentado para los próximos tres años, una vez que el Consejo de Ministros cumpla con el trámite burocrático de su aprobación, será de 700 millones de pesetas (50 millones para obras de limpieza y adecuación del cauce del Cigüela y 650 para gastos de explotación y mantenimiento).