Las eléctricas privadas, enfrentadas por sus distintos puntos de vista sobre la reordenación del sector

Las compañías eléctricas se reúnen hoy en la sede de Unidad Eléctrica (UNESA), la asociación en la que se agrupan, con las relaciones muy tensas como consecuencia de las distintas posturas que mantienen sobre la reordenación del sector propuesta por el Ministerio de Industria. Sobre dicha reordenación se presentarán tres propuestas, respaldadas por Iberduero e Hidrola, por un lado; Unión Eléctrica Fenosa y Fecsa, por otro, Sevillana, por otro. Los enfrentamientos en este aspecto no permiten aventurar ningún acuerdo para presentar una única propuesta al ministerio.

El tradicional trabajo en equipo que ha caracterizado a las eléctricas privadas en su pugna contra el grupo público Endesa dentro de la órbita de UNESA, se ha tomado en tensas relaciones entre ellas. La firma pública asiste a este debate interno como convidado especial, pero no tiene previsto involucrarse más allá de lo que le atañe. Hidrocantábrico y Viesgo, las pequeñas en discordia, no han definido sus posiciones.El debate surgió tras conocerse el arreglo alcanzado entre Iberduero e Hidrola. Sevillana no tardó en sugerir que estaba de acuerdo con la propuesta de Industria, al contrario de Hidrola e Iberduero. Unión Fenosa, cuyo presidente Julián Trincado tiene que oficiar de moderador como presidente de UNESA, también se opuso a la propuesta y elaboró una propia a la que se ha unido Fecsa. Ante eso es difícil que hoy se alcance un acuerdo para una única propuesta y que, por ello, se proponga ampliar el periodo de reflexión.

Todas las propuestas aceptan, en principio, la creación de una sociedad holding que aglutine todos, los activos nucleares que propuso Industria. Sin embargo, en el resto de las propuestas ministeriales -agrupación en dos o tres unidades de gestión del resto de activos de generación eléctrica (carbón, fuel, gas e hidráulica) y separación de éstos de la distribución- no hay coincidencia.

Oposición

Iberduero e Hidrola se oponen a ceder sus otros activos (en todo caso aceptarían que ellos fueran cabeza) y proponen que se acabe con las compensaciones -unas empresas pagan y otras reciben como consecuencia de que todas vierten a la red eléctrica su energía y no todas venden igual siendo, precisamente, Hidrola e Iberduero tradicionalmente pagadoras (8.701 y 6.159 millones, respectivamente)- y que los costes financieros se vayan pagando con cargo a la tarifa del año en que se producen con el fin de no incrementar el valor de la inversión. Sin embargo, parece que esto no se puede compartir con el diferimiento de costes que existe en la actualidad y tiene poco que ver con el modelo que busca Industria, según fuentes sectoriales. Iberduero, además, pide que se realice una amortización rápida, en nueve anos, de la central nuclear de Lemóniz "considerando que ya no se va a poner en marcha".

Unión Fenosa y Fecsa quieren que el holding de generación se haga con referencia a inversiones futuras. De esta forrna, Fecsa podría continuar con su proyecto de crear un holding de producción y distribución en Cataluña y ambas quedarse con activos. Asimismo, estarían dispuestas a separar generación de distribución a la larga. "A partir de ahí vendría la concentración entre empresas en dónde la tenga que haber", según una fuente de esas compañías.

Por último, Sevillana, cuyos representantes lo habían propuesto en el curso sobre el sector que se celebró el pasado verano en Santander, se acerca a Industria. La diferencia que existe es que propone que las separaciones de los activos de generación se haga por tipo de producción (carbón, fuel, gas, nuclear, hidráulica).