Los obispos afirman que el fomento de anticonceptivos aumenta los casos de aborto
La oficina de información de la Conferencia Episcopal publicó ayer un documento en el que, entre otras críticas a la campaña del Gobierno para el uso de los anticonceptivos entre los jóvenes, se señala que ésta "oculta sistemáticamente a la población que la promiscuidad sexual y el amplio uso de preservativos llevan a multiplicar los embarazos no deseados y los abortos".
El informe, que pretende ser un "instrumento de trabajo y reflexión ante la campaña de los preservativos", abunda en los argumentos expuestos por anteriores documentos de la jerarquía eclesiástica sobre el mismo tema, y coincide con la puesta en marcha por el arzobispado de Madrid de la contracampaña Propóntelo, propónselo.El documento, titulado Joven, presérvate de la desinformación y vive una sexualidad sana, recuerda la campaña gubernamental en favor del uso de preservativos, defiende que la castidad es una actitud moral eminentemente social y afirma que si la sexualidad no se regula puede acabar creando situaciones de caos.
Los obispos manifiestan que "se confunde a la opinión pública cuando se afirma que el preservativo es un medio profiláctico plenamente eficaz", cuando, "... estudios científicos de solvencia demuestran que, utilizado por menores de 18 años, el preservativo no es eficaz en un 10% a un 33% de los casos". Estas tesis se pretenden reforzar con ejemplos como el de una campaña de difusión de condones realizada en 1948 por el Gobierno japonés. Según el episcopado, las autoridades niponas intentaron con ella controlar el creciente número de abortos, pero los resultados no hicieron sino multiplicar el número de interrupciones del embarazo en Japón.
Crisis moral
Por otra parte, el obispo de Seo de Urgel, Juan Martí, desmintió ayer unas declaraciones en las que se distanciaba del reciente documento episcopal sobre la crisis moral de la sociedad. Martí precisó, a través de un comunicado, que está completamente de acuerdo con el documento titulado La verdad os hará libres, en cuya redacción participó, aunque reconoce que hizo unas matízacíones a la prensa sobre el tono negativo del lenguaje en la primera parte del texto.
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