El carácter deliberante del sínodo
Juan Pablo Il repasó ayer también, ante los padres sinodales, la polémica surgida sobre si los sínodos debían ser o no deliberativos o, por el contrario, tener un carácter netamente vinculante en lo doctrinal.Con ello el Papa respondía a aquellas voces levantadas por los obispos de tendencia más progresista en favor de que las decisiones del sínodo tuvieran mayor peso por sí mismas. En concreto, el cardenal brasileño Aloisio Lorscheider se había pronunciado en este sentido en una entrevista publicada por la revista italiana Familia Cristiana.
El Pontífice reconoció que es potestad suya declarar la finalidad de una reunión de esas características y matizó que, al recogerlas luego en un documento papal, aunque se hayan hecho en el marco de un sínodo consultivo, asumen una categoría prácticamente deliberativa.
Al margen de esta cuestión concreta acerca del carácter jurídico del sínodo, el tono del discurso del Papa ha sido calificado por algunos expertos en temas vaticanos de contener excesivos tintes pesimistas.
La descripción hecha por Juan Pablo II de la situación tras el Concilio no es muy distinta del diagnóstico habitual que al respecto hace el prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, cardenal Josef Razinger.
