Chile y España firman un tratado de cooperación y amistad

I. CEMBRERO ENVIADO ESPECIAL Los ministros de Asuntos Exteriores de Chile y España firmaron ayer, en presencia del presidente Patricio Aylwin y de los Reyes de España, un ambicioso tratado de cooperación y amistad entre ambos países, el tercero de los concluidos por el Gobierno español con capitales latinoamericanas y, probablemente, el que más fácilmente se cumplirá por la enorme atracción que ejerce este país sobre el empresariado español.

Don Juan Carlos y doña Sofia iniciarán hoy la que será, probablemente, la etapa más delicada de su primer viaje a Chile. Se desplazarán a Valdivia, a 800 kilómetros al sur de Santiago, donde tanto las organizaciones mapuches como el ultraizquierdista Frente Manuel Rodríguez (FMR) amenazan con actos e incluso atentados simbólicos para, según reza un comunicado de este último grupo, "repudiar la visita de los Reyes españoles".

Tras visitar la Biblioteca Nacional, y antes de recibir a representantes de la colonia española, el Rey asistió a la firma de un tratado que, en su anejo económico, pretende inyectar en el próximo lustro 2.000 millones de dólares (cerca de 200.000 millones de pesetas) en la economía chilena. Un 60% de esa cantidad correspondería a inversiones españolas y el 40% a créditos.

A diferencia de los días anteriores, el Rey evitó ante la colonia española, muy conservadora, hacer hincapié en el mal trance que había pasado Chile durante el mandato de Pinochet.

Por sugerencia de su séquito quitó a última hora de su discurso una frase en la que recordaba que "Chile, como España antes, ha vivido en los últimos años momentos dramáticos y dolorosos que están siendo felizmente superados".