Hallados restos de ocho caballos calcinados en un vertedero de Granada

Las autoridades sanitarias de la Junta de Andalucía están analizando los restos óseos de ocho caballos que han sido hallados calcinados en el vertedero municipal del Barranquillo de San Jerónimo (Granada). Los ganaderos de la zona se han alarmado, ante la posibilidad de que se trate de un brote de peste equina en Granada, enfermedad que durante este tercer rebrote no ha salido de la provincia de Málaga. La Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta ha indicado que los caballos no murieron a causa de la peste equina.

Según informa Europa Press, la consejería, cuyo titular es Leocadio Marín, indicó ayer que no hay motivo de alarma sanitaria ni se puede hablar de la existencia de peste equina en Granada. Se han adoptado medidas de observación de todas las explotaciones de équidos próximos a dicho vertedero.Los caballos, hallados por la policía local el pasado día 20, en la carretera de Alfacar (Granada), habían sido rociados con gasolina, quemados y arrojados a un vertedero en el que usualmente se abandonan animales muertos. La policía desconoce aún la identidad de su propietario. Según la Junta, se trata de animales arrojados a lo largo de un periodo prolongado de tiempo y llevan más de un mes muertos.

El número de caballos muertos desde primeros de septiembre en la provincia de Málaga ascendía ayer a 101, de los cuales 25 han fallecido en la localidad de Álora, según fuentes de la Consejería de Agricultura. Esta cifra es, según algunos ganaderos y alcaldes de localidades afectadas, mucho mayor.

Desde África

El director general de Agricultura, Ganadería y Montes, Gerardo de las Casas, manifestó ayer que no tenía conocimiento de que caballos procedentes de África hubieran llegado a Sotogrande (Cádiz) a participar en los campeonatos de polo. El diputado andalucista José Guerrero había apuntado que el nuevo rebrote podría deberse a la entrada de caballos africanos.Los datos de la Junta, que ha abierto 62 expedientes desde que se declaró la existencia del rebrote, contrastan con las declaraciones del alcalde de Álora, Juan Martos, quien dijo que las autoridades sanitarias son "flexibles con los ganaderos que tienen caballos sin vacunar". La Guardia Civil mantiene vigiladas las comunicaciones con Jaén para evitar que los équidos pasen a otra región desde Andalucía.