Los buques irán al completo y la travesía durará cerca de 20 días

Los tres buques de guerra españoles que partirán hacia el Golfo zarparán a comienzos de la semana próxima "al completo", es decir, con toda la tripulación, sistemas de armas y suministros. La autonomía del grupo será de unas 5.000 millas náuticas y 20 días, que son aproximadamente la distancia y los días que tardará la fragata Santa María en situarse en el mar de Omán, junto al Estrecho de Ormuz. Las tripulaciones de los barcos las integran 496 hombres, de los que unos 200 son jóvenes que cumplen el servicio militar obligatorio. En los barcos viajarán 39 oficiales y 57 suboficiales. El resto son cabos especialistas.La fragata Santa María, mandada por el capitán de fragata Antonio León Zarco, de 49 años, llevará dos helicópteros Sea Hawk, capaces de detectar posibles blancos situados a más de 150 kilómetros de su barco. Se trata del arma más moderna en la lucha antisubmarina, pero también sirve para detectar con antelación aviones o misiles que se dirijan al buque. Esta capacidad puede ser empleada desde el barco, y en tiempo real, para disparar a grandes distancias misiles o torpedos. Barco y helicóptero actúan como una sola unidad integrada, ya que el sistema Data Link de que disponen -no así las corbetas- hace que las computadoras del buque y el helicóptero trabajen al unísono.

La tripulación de la fragata, como las de las corbetas Descubierta y Cazadora, continuaron ayer en sus bases -Rota y Cartagena-los trabajos de puesta a punto de las naves y de carga de material a transportar. La fragata, según uno de sus mandos, está "al 100%", si bien los preparativos finales no culminarán hasta el domingo.

Durante la travesía hasta sus destinos, las tres unidades españolas estarán bajo el mando de Zarco. Una vez que crucen el canal de Suez, las corbetas Descubierta y Cazadora, mandadas respectivamente por los capitanes de corbeta Juan Carlos Muñoz Delgado, de 43 años, y Mariano Mayo, de 42, se situarán al sur del mar Rojo, mientras la fragata seguirá navegando varios días más hasta su destino.

"Orgullosos de ir"

Oficiales de los barcos designados para partir señalaron ayer que se sienten "orgullosos de ir" a la misión que se les encomienda y que, desde el punto de. vista profesional, "es una suerte" que les haya correspondido zarpar hacia el Golfo, aunque comprenden que sus familias están preocupadas. Agregaron que, en su opinión, van "a defender intereses nuestros".

Preguntados por el hecho de que en los barcos viajen soldados de la mili, señalaron que ningún marinero se ha negado a partir. "Estamos todos como una piña", aseguró uno de los mandos.

Según Defensa, las tripulaciones serán relevadas cada dos meses. Semanalmente, un avión correo acudirá a la zona. Los marineros podrán hablar con sus familias una vez a la semana.