La depuradora de Galindo eliminará un 65%, de la polución del Nervión en 1993

El Bajo Nervión Ibaizabal verá eliminado en un 65% su contaminación actual cuando entre en funcionamiento en 1993 la segunda fase de la depuradora de Galindo (Vizcaya), que prevé un tratamiento biológico de las aguas residuales. La primera fase, inaugurada ayer, con un año de retraso por el ministro de Obras Públicas, Javier Sáenz Cosculluela, y el lehendakari, José Antonio Ardanza, entrará en funcionamiento plenamente dentro de tres meses, según explicó el ingeniero responsable de la construcción de la depuradora.

La planta ha sido financiada íntegramente por el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU) con 5.100 millones de pesetas. El Consorcio de Aguas del Gran Bilbao, por su parte, ha invertido unos 4.700 millones en la red de colectores e interceptores que trasladan a la depuradora las aguas residuales de la margen izquierda de la ría.

El presidente del Consorcio de Aguas del Gran Bilbao, Beti Duñabeitia, solicitó del ministro de Obras Públicas su colaboración en la financiación de la segunda fase, que debería estar finalizada para 1993. La inversión total asciende a 16.000 millones de pesetas, de los cuales 6.500 serán cofinanciados por la Diputación de Vizcaya y el Gobierno vasco. En ese año estarán enganchados a la depuradora todos los municipios de la margen izquierda de la ría y parte de la derecha. Las previsiones del consorcio sitúan en el horizonte de 1996 la reducción de la contaminación en un 85% en el Bajo Nervión. Para esa fecha, la depuradora de Galindo tratará cerca de 15,6 metros cúbicos por segundo de agua, su capacidad máxima.