Noche de 'sherpas'
La noche del martes al miércoles fue especialmente ajetreada en las salas de reuniones de la Universidad de Rice, en Houston. Había que redac.tar el acuerdo final de la cumbre económica de los Siete, y la cosa no era nada sencilla.Por eso, los llamados sherpas (asistentes presidenciales que hacen el trabajo sucio y permiten llegar a la cumbre), tuvieron que trabajar hasta altas horas de la madrugada.
Pero, al final, el trabajo mereció la pena. Ya, a primeras horas de la mañana, durante la sesión plenaria, George Bush, Brian Mulroney, Toshiki Kaifu, François Mitterrand, Helmut Kohl, Margaret Thatcher, Giulio Andreotti y Jacques Delors, sólo tuvieron que incluir los últimos matices en los textos, ya traducidos, que cada uno tenía encima de la mesa.
En total, 16 folios, divididos en doce apartados y 84 puntos concretos, en los que se habla de casi todo. De la situación económica internacional, el comercio, las subvenciones agrícolas, democracia en el bloque del Este, ayudas a la URSS, medio ambiente, deuda del Tercer Mundo, drogas, terrorismo, algo así como una auténtica enciclopedia.
Esta labor de conciliación de intereses en la redacción de los documentos, que ha forzado a innumerables retoques, no impidieron, sin embargo, que el anfitrión de la cumbre, el presidente Bush, pudiera adelantar en una hora la cita con la prensa para dar lectura al comunicado final y responder a las preguntas de los periodistas.
Los sherpas habían conseguido, una vez más, que sus jefes terminaran la cumbre en óptimas condiciones.
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