El ex jefe del partido en Praga, condenado a 4 años por reprimir protestas populares
El antiguo jefe del Partido Comunista Checoslovaco en Praga, Miroslav Stepan, fue condenado ayer a cuatro años de prisión por su implicación en la represión de varias manifestaciones de opositores al régimen comunista durante los últimos dos años. Un tribunal de Praga le condenó también por abuso de poder, tras un juicio que duró nueve días.Stepan, de 44 años, que ha permanecido detenido desde que fuera arrestado el pasado 23 de diciembre, escuchó con aire perplejo el veredicto. El antiguo dirigente comunista fue condenado por haber ordenado el uso de garrotes, perros y gases lacrimógenos para dispersar a millares de manifestantes anticomunistas en octubre de 1988 y en enero del pasado año.
Uno de los detenidos en las citadas manifestaciones de enero fue el dramaturgo digidente Vaclav Havel, actual Jefe de Estado checoslovaco. Havel fue condenado entonces a 9 meses de prisión por participar en las manifestaciones y fue posteriormente puesto en libertad tras haber cumplido la mitad de la pena.
No se ha podido demostarar la participación de Stepan en la brutal represión de la manifestación del pasado 17 de noviembre, punto de partida de la revolución de terciopelo que provocó la caída del régimen comunista.
El juicio transcurrió en su mayor parte a puerta cerrada, pues muchas de las pruebas y documentos presentados por el fiscal constituían secreto de Estado.
En su intervención final ante el tribunal, Stepan negó todas las acusaciones vertidas contra su persona, que le podían haber acarreado 10 años de prisión, y admitió únicamente "responsabilidad política".
El ex dirigente comunista, que aseguró que recurirá la sentencia, comparó la vista con los juicios políticos de los años cincuenta.
Se trata de la primera condena de un ex dirigente comunista después de la revolución checoslovaca de noviembre pasado. Por otra parte, el antiguo primer ministro eslovaco, Peter Colotka , acusado de abuso de poder y malversación de fondos, ha sido liberado tras tres semanas sometido a prisión preventiva
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