La recualificación del Sur

A veces los graves problemas urbanos heredados, que el tiempo y la historia no han resuelto de forma contundente, constituyen magníficas oportunidades para la transformación positiva de la ciudad. Arganzuela-Este, por ejemplo, constituye un amplio sector urbano sometido históricamente y de forma sucesiva a planes y, trazados urbanísticos contradictorios que han cristalizado en la formación de un intersticio urbano en el que predomina el abandono, la obsolescencia y el deterioro ambiental.El proyecto barroco de Carlos III en el siglo XVIII, la trama reticular propuesta para la zona por el Plan Castro en 1859, el trazado del ferrocarril y la ubicación de estaciones el 1963, las propuestas del Plan General de 1985, por citar sólo algunos hitos del proceso de conformación urbanística de Arganzuela-Este, han aportado tratamientos antitéticos que permiten una comprensión de su problemática actual.

Hoy, en el contexto de los trabajos de: Revisión del Programa de Actuación Urbanística del Plan General de Madrid que el Ayuntamiento está desarrollando, debemos ver Arganzuela-Este no tanto como un problema sino como una oportunidad irrepetible para la recualificación del Sur a través de la creación de áreas de nueva centralidad. Los tradicionales desequilibrios entre el centro y la periferia de muchas ciudades se reproducen en Madrid mediante una profunda segregación social e importantes desigualdades urbanísticas entre el Norte: y el Sur.

En el Sur vive el 52% de la población del municipio, el 62% de los analfabetos y el 68% de los trabajadores industriales. En el Norte reside el 48% de la población de Madrid, el 82% de los titulados universitarios y el 84 % de los trabajadores del sector terciarlo. Además en el Norte están el 80% de las instalaciones deportivas, el 81% de las camas hospitalarias y el 72% de los parques de distrito. Estos datos ponen de manifiesto que la desigualdad Norte-Sur del municipio de Madrid no es sólo algo ampliamente conocido sino un aspecto fundamental para inspirar las futuras actuaciones para la transformación de la ciudad.

El motor de crecimiento y recualificación del Norte ha sido la centralidad, la localización de funciones centrales. El motor de crecimiento del Sur ha sido el ferrocarril, la industria y la inmigración masiva.

La creación de una nueva centralidad en Arganzuela-Este se presenta por tanto como una estrategia reequilibradora de los desajustes Norte-Sur y recualificadora de una zona deteriorada física y funcionalmente.

La formación de este auténtico centro de la periferia sur exige completar la estructura y comunicaciones viarias mejorando las conexiones con los barrios periféricos. La conexión con Vallecas puede garantizarse a través de Méndez Álvaro y la avenida de Entrevías que constituiría una auténtica prolongación de la Castellana hacia el Sur. La relación con Usera y Villaverde puede lograrse a través de la avenida de Córdoba y la carretera de Andalucía. Paralelamente este nuevo centro del Sur debe relacionarse coherentemente con el parque Lineal del Manzanares y con el extremo del Pasillo Verde Ferroviario. Finalmente debe acoger, además de residencia., dotaciones y funciones centrales de carácter cultural, recreativo, administrativo, terciario superior, comercial, etcétera. Esto permitirá una aproximación del centro a la periferia sirviendo corno motor y vehículo de renovación de los barrios del Sur del municipio. Complementariamente, la transformación a medio plazo de la estación de contenedores del Abroñigal en una moderna estación para el tren de alta velocidad será un factor decisivo en las estrategias de recualificación de esta zona de la ciudad. Su proximidad a la Estación Sur de Autobuses y a las demás infraestructuras de transporte público de la zona hará posible la conformación de un importante intercambiador de transporte que dotará a Arganzuela-Este de la accesibilidad característica de las áreas de centralidad.

Parques industriales

El Plan General de Madrid de 1985 califica como industrial una superficie muy importante de Arganzuela-Este que habiendo sido descalificada como tal por el planteamiento anterior (1963) estaba afectada por un proceso de transformación hacia la residencia y el comercio. Hoy día, en el interior de la almendra, resulta coherente la evolución progresiva de las instalaciones industriales obsoletas y con impacto urbano negativo hacia actividades y usos más compatibles con la ciudad central. Se trata en definitiva de estimular una recualificación urbana en consonancia con la necesaria transformación de la base económica local. La creación de nuevos parques industriales en la periferia metropolitana de Madrid por parte de la Comunidad Autónoma es perfectamente compatible un estas propuestas de nueva centralidad para el Sur.

Este gran proyecto es obviamente muy ambicioso, sin embargo es importante considerar el creciente protagonismo de Madrid en el nuevo contexto europeo como capital receptora de innovación e inversiones de empresas que van a operar en toda España. Madrid puede ser un gran motor de las transformaciones económicas del país y ello exige una expansión y recualificación de su centralidad central.

Hemos pasado de una situación de crisis y estancamiento económico que influyó en los errores de diagnóstico del vigente plan de 1985 a una coyuntura de expansión y transformación que permite potenciar el nuevo papel de Madrid en el contexto europeo. Hemos de asumir en el terreno del urbanismo el reto histórico de canalizar el potencial de crecimiento urbano con una "especial sensibilidad" hacia lo cualitativo y hacia la solución de los ancestrales desequilibrios de Madrid. En la etapa de crisis en la que se concibió el plan del 85 se optó por la estrategia de acometer proyectos de "escala intermedia". Ahora es posible asumir la ambición de los "grandes proyectos urbanos" dentro de un contexto más flexible y participativo que garantice la transformación positiva de la ciudad.