Los consumidores de Cantabria dejan de comprar carne por valor de 400 millones
Los carniceros y chacineros de Cantabria calculan en 400 millones de pesetas las pérdidas sufridas por el sector en el curso de los últimos 50 días desde que a mediados de mayo se descubriese en la región un importante tráfico ilegal de carne de reses muertas por causas naturales o traumatismo. El quebranto económico prosigue en estos momentos desde que se hicieran serias advertencias oficiales sobre el riesgo que supone el consumo de hígado vacuno.Según acaba de denunciar el secretario general de aquella asociación, Héctor Castañeda, "los carniceros vienen desde hace cinco años pidiendo vigilancia por el uso de drogas y hormonas para el engorde artificial del ganado, pero en lugar de ocuparse de esta cuestión, la Administración lo que hace es trasladar el problema a los comerciantes".
Por otra parte quedará suspendida a partir de hoy la orden, dictada hace dos semanas, de inmovilización absoluta de las existencias de hígado de vacuno en algunos mataderos de Castilla-La Mancha y de los hígados que podrían derivarse del sacrificio de reses en una delimitada zona de riesgo sanitario de Toledo, informa José Luis Fernández.
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