El Estado indemnizará a un periódico al que excluyó de la publicidad electoral oficial

El Tribunal Superior de Justicia de Galicia ha condenado al Gobierno Civil de La Coruña a indemnizar a la empresa editora de El Correo Gallego por haber excluido a este periódico de la publicidad electoral de los comicios al Parlamento Europeo de 1989. El tribunal estima que tal exclusión infringió el principio constitucional de igualdad.

El origen de esta sentencia fue el acuerdo del gobernador civil de La Coruña por el que tácitamente excluyó al diario El Correo Gallego de la publicación de las secciones, mesas y locales electorales de la provincia de La Coruña para las elecciones al Parlamento Europeo. El Gobierno civil decidió difundir tales datos en los diarios La Voz de Galicia y El Ideal Gallego.

La Editorial Compostela, editora de El Correo Gallego, protestó contra dicho acuerdo, y alegó que este periódico es el segundo diario de la provincia en tirada, difusión y lectores, tras La Voz de Galicia. Mantenido el acuerdo por el Gobierno civil, la editorial lo impugnó ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Galicia, por estimar que se había producido una discriminación inconstitucional, y en concreto una vulneración del derecho a obtener información veraz. La editorial recurrente pidió una indemnización de 3.200.000 pesetas.

El Tribunal Superior de Justicia de Galicia ha anulado el acuerdo del gobernador civil de La Coruña, por entender que la exclusión de El Correo Gallego "infringe el principio de igualdad". Declara también el derecho de la editorial recurrente a ser indemnizada por los daños y perjuicios que le ocasionó la publicación, por su propia iniciativa, de la relación de secciones, mesas y locales electorales

En los fundamentos jurídicos de la sentencia, de la que ha sido ponente el magistrado José María Gómez y Díaz-Castroverde, se señala que en cumplimiento del artículo 24.4 de la ley orgánica de Régimen Electoral General sobre publicación de la información electoral oficial en varios periódicos, lo correcto habría sido insertarla en uno de los dos diarios radicados en La Coruña y en El Correo Gallego, de Santiago de Compostela. Por el contrario, estima que la Editorial Compostelana "se vio discriminada sin causa, fundamento o razón suficiente".