Iran pide ayuda urgente para las víctimas del seísmo

Toda la población iraní estaba ayer movilizada en ayuda de los damnificados por el terremoto que devastó dos provincias noroccidentales el pasado jueves. Sin embargo, las autoridades de Teherán han reconocido que necesitan la ayuda exterior para hacer frente a los graves daños materiales del seísmo y ayudar a las decenas de miles de heridos. Los responsables iraníes dijeron ayer que el número de muertos se eleva ya a más de 32.000. La ONU, por su parte, cifra los fallecimientos en 40.000 y en alrededor de 100.000 las personas heridas. Ciudades enteras de las provincias de Gilán y Zanján han quedado arrasadas.

El Gobierno iraní reconoció ayer que no puede hacer frente por sí solo a la tragedia que se ha abatido sobre sus tierras más fértiles, en el Noroeste del país, y solicitó la ayuda internacional. Las autoridades asdmiten la falta de me dios para llevar a cabo las labores de desescombro y rescate de víctimas atrapadas. Sin embargo, las dificultades para hacer llegar tal ayuda, primero a Irán y después a las zonas asoladas, van a convertir la campaña de socorro en una carrera contra la muerte. Ayer, sólo aterrizó en Teherán un avión de la organización Médicos sin Fronteras, con cinco doctores pero sin equipo quirúrgico ni medicamentos. La Media Luna Roja iraní fue explícita al relacionar las necesidades urgentes del país en estos momentos. Responsables de la organización, que equivale a la Cruz Roja en Occidente, han so licitado antibióticos y vitaminas, hilo quirúrgico, equipos ortopédicos, plasma sanguíneo de di versos tipos, tiendas de campaña, ropas y mantas.

Necesidad de alimentos

Las dificultades de Irán serán importantes incluso después de que se regularicen las labores de rescate. Según expertos occidentales destinados en Teherán, los daños causados por el terremoto en las áreas fértiles y granjas del noroeste pueden costar a Irán una factura en importación de alimentos de miles de millones de dólares. Hasta ahora, Irán ha gastado 3.000 millones de dólares en importar alimentos. Precisamente las dos provincias más afectadas por el seísmo, Gilán y Zanján, son las mayores productoras de arroz y fruta y se encontraban en pleno proceso de expansión de zonas agrícolas.

Mientras se repiten los llamamientos de ayuda internacional, testigos iraníes procedentes de las zonas siniestradas se refieren a la incapacidad de los puentes aéreos entre la capital, Teherán, y las provincias afectadas para trasladar ayuda y transportar a los miles de heridos.

Tres países -Estados Unidos, Reino Unido a Irak- cuyas relaciones con Irán son peor que malas se han apresurado a ofrecer su ayuda a la república islámica, que por el momento no ha contestado a tal ofrecimiento.

Por otra parte, el Instituto Geofísico de Teherán informó de que durante todo el día de ayer se registraron alrededor de cien temblores de magnitud decreciente en las provincias noroceidentales. Los miles de heridos y personas que han perdido su hogar se agrupan en descampados a la espera de ser trasladados a hospitales del centro del país, unos, y recibir ayuda material y alimentos, los otros.

En el aeropuerto de Teherán el Ejército ha intervenido para aplacar los encolerizados ánimos de parientes de habitantes de las zonas devastadas que, ante la imposibilidad de tener plaza en los vuelos que salen hacia esas provincias, provocaron desórdenes en la terminal aérea.