El alcalde de Washington renuncia a la reelección tras haber sido procesado

El alcalde de Washington, Marion Barry, procesado por 14 delitos de consumo de drogas y perjurio ante un gran jurado, ha declarado públicamente que no se presentará a la reelección el próximo mes de noviembre.

La decisión, que ha sido tomada independientemente del resultado del juicio que le enfrenta al propio gobierno norteamericano, pone punto final, de momento, a una de las crisis políticas más graves en la historia de este país.Barry anunció su retirada a través de un mensaje emitido por las emisoras de radio y televisión de la Universidad de Howard el pasado jueves por la noche. Su discurso duró 15 minutos y sirvió para que Barry explicara que su renuncia era "buena para la ciudad".

El anuncio del alcalde de dar por terminada su carrera política se produce cinco días después de que el reverendo Jesse Jackson le recomendara su retirada, como un primer paso para negociar con la fiscalía su propio futuro.

Barry, que tiene 54 años de edad y es el alcalde de la capital federal norteamericana desde 1978, continuará al frente del municipio hasta que concluya su actual mandato, el próximo 2 de enero. Para entonces su juicio habrá terminado y se conocerá ya si es o no culpable de los delitos de los que le acusa el Gobierno federal. Barry fue detenido por agentes del FBI el pasado 18 de enero poco después de consumir cocaína sintética. En EE.UU el consumo de esta droga está penalizado.

El mensaje de Barry coincidió con la conclusión de la elección de los 12 miembros del jurado, lo que ha dado pie a que algunos justifiquen la acción de Barry con el intento de sus defensores de presentarle como una víctima del sistema judicial norteamericano. Los abogados del alcalde no han conseguido que el fiscal que atiende el caso, Jay B. Stephens, acepte un pacto que libere a Barry del fantasma de la cárcel. El acusado se enfrenta a una condena de 20 años de prisión y multas por valor de un millón de dólares.

Durante su discurso, anunciando su decisión de no presentarse a la reelección, Barry explicó que había llegado el momento para que la ciudad iniciara "una cura política". El alcalde citó varios pasajes de la Biblia y recordó algunos de los logros de Washington durante sus 12 años como administrador de la ciudad. Barry hizo referencia a las mejoras llevadas a cabo en los barrios negros, al trabajo desarrollado por mejorar la vida de los ancianos y los derechos civiles de los 650.000 habitantes de esta ciudad, cuyo 70% son de raza negra.

Convencido de que ganaría

El alcalde también se refirió a si lucha personal contra lo que definió como su "adicción al alcohol y las medicinas". Barry explico que estaba convencido de que se presentaba a un nuevo mandato "ganaría las elecciones", pero se preguntó a continuación: "¿Qué tendría de bueno, si en la batalla pierdo mi alma?".Barry dijo que había sufrido una fuerte oposición por parte de sus colaboradores a que tomara esta decisión, agradeció el apoyo económico para su campaña electoral y pidió a sus seguidores que esperen su consejo sobre a quien hay que votar.