¿Desidia o rapiña consentida?
Imagínense una ciudad en la cual un vecino cualquiera baja un día a la calle y comprueba que su coche no está en el sitio donde estaba aparcado. Ese coche estaba correctamente aparcado en ese mismo lugar desde hacía un par de meses, debido a una avería mecánica que imposibilitaba su uso, y estaba a la espera de una prevista reparación.En la idea de que hubiese sido retirado por algún servicio municipal, este vecino llamó al 092. Tras nuevas gestiones telefónicas le fue confirmado que su coche había sido retirado por una grúa, y se hallaba en un parque de recogida de vehículos abandonados.
Este vecino dejó constancia de su indudable voluntad de recuperar el coche, quedando consignado en el registro de ese parque, así como que dicha retirada tendría que hacerse en un plazo de 10 días.
Dentro de ese plazo, este vecino autorizó a un taller para que retirara su coche del parque y procediera a su reparación. El taller recogió el coche y de inmediato llamó a ese vecino para que fuese urgentemente a ver el estado en el que estaba el coche.
El coche estaba con un lateral profundamente abollado, dos ventanillas destrozadas, la palanca del cambio de marchas había sido cortada para arrancar la consola donde se hallaba una radio estéreo de encastre fijo. Faltaba una caja de herramientas y la documentación del coche.
Este vecino soy yo (el abajo firmante). Ese coche es de mi propiedad. Esa ciudad es Madrid. Ese parque de recogida de vehículos abandonados está en la avenida de Daroca, s/n.
Me abstengo por ahora de hacer juicios de valor por haber emprendido (en paralelo a este escrito) las oportunas gestiones legales para aclarar este asunto.
Solamente hago dos preguntas: ¿cómo es posible que un vehículo correctamente aparcado y con sus placas de matrícula bien visibles pueda ser retirado por un servicio municipal sin el menor aviso previo a su propietario? ¿Cómo es que un servicio municipal no puede garantizar la integridad física de un objeto custodiado por él, toda vez que ya se había avisado que interesaba su recuperación?
Se me ocurre que ambas preguntas pueden y deben ser contestadas, sólo hay que tener un poquito de vergüenza por parte de quien corresponda. Veremos.-
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