La ONU crea un índice para medir el nivel del desarrollo humano
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en un informe elaborado con análisis que colocan al hombre como centro de las preocupaciones, propone un nuevo patrón para evaluar el grado de bienestar y progreso humanos: el índice de desarrollo humano, que trasciende el mero crecimiento del producto nacional bruto (PNB). En sus conclusiones, el documento aconseja la aplicación de políticas que amplíen las posibilidades actuales del ser humano.
El informe del organismo dependiente de la ONU, preparado por un equipo internacional de especialistas dirigido por el ex ministro de Finanzas y Planificación de Pakistán Mahbul Ul Haq, enmarca el desarrollo en aspectos como el logro de una vida prolongada y saludable, educación y acceso a los recursos necesarios para tener una vida decente. Otras oportunidades importantes citadas son la libertad política y el respeto a los derechos humanos.El informe del PNUD, que hoy se presenta, analiza la situación de 130 países ricos y pobres para conocer cómo el crecimiento económico se traduce o no en "desarrollo humano". Subraya en las conclusiones que si los esfuerzos nacionales dirigidos hacia el desarrollo y la cooperación se canalizan adecuadamente, el mundo se encaminará hacia un nivel aceptable de desarrollo humano y a la creación de un ambiente para que el hombre pueda desarrollar todas sus potencialidades.
El documento agrega que los países en desarrollo han conseguido progresos significativos en materia de desarrollo humano durante las tres últimas décadas, y cómo la esperanza de vida aumentó de 46 años en 1960 a 62 años en 1987 en el hemisferio sur y el índice de alfabetización creció del 43% al 60%, la tasa de mortalidad de niños menores de cinco años se redujo a la mitad y la cobertura de la atención médica primaria se amplió al 61% de la población.
Pese a todo, el mayor reto para la década de los noventa continúa siendo "la eliminación de la inmensa carga que representa la privación humana". Más de 1.000 millones de personas siguen viviendo en condiciones de pobreza casi absoluta, casi 900 millones no saben leer ni escribir y 1.750 millones carecen de agua potable. Además, 10 millones no disponen de vivienda, unos 800 millones pasan hambre todos los días, 150 millones de niños menores de cinco años -uno de cada tres- se encuentran en estado de desnutrición y 14 millones mueren antes de cumplir esa edad.
Brecha Norte-Sur
La brecha Norte-Sur en el campo estudiado por el organismo de la ONU se ha reducido "considerablemente", aunque en 1987 el ingreso promedio per cápita en el Sur equivalía al 6% del ingreso del Norte. Los redactores del documento opinan que es posible lograr niveles bastante respetables de desarrollo humano incluso con niveles de ingreso modestos, y citan los aceptables índices de salud y alfabetización de China y Sri Lanka.
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