Un consejero andaluz niega el robo de documentos del 'caso Juan Guerra'

El consejero de Fomento y Trabajo de la Junta de Andalucía, José María Romero, afirmó ayer ante el pleno del Parlamento andaluz que el robo cometido en la sede de la Dirección General de Cooperación Económica, dependiente de esa consejería, fue perpetrado "por delincuentes comunes" y no hubo sustracción alguna de documentos relacionados con el expediente de la empresa Construcción Modular Andaluza, vinculada a Juan Guerra González, hermano del vicepresidente del Gobierno.Romero señaló que tras el robo cometido durante el fin de semana del 20 al 21 de enero pasado, durante el cual se sustrajeron diversos objetos de valor y material técnico y se quemaron algunos papeles, "no se sustituyeron documentos ni se borraron huellas algunas". Esto fue confirmado por la policía de Sevilla una semana más tarde de haber ocurrido el suceso y se relacionó con la comisión de otros tres delitos de ese tipo en pisos de la Avenida de República Argentina, donde se encuentran las citadas oficinas de la Consejería de Fomento. La policía señaló como posible causa de la quema de documentos el que los delincuentes los hubieran utilizado para alumbrarse a modo de antorcha.

El consejero explicó que la denuncia fue interpuesta el día 22, una vez fueron descubiertos los hechos y tras el paréntesis de descanso laboral del fin de semana. Asimismo indicó que si no se dió cuenta a la prensa hasta dos días más tarde de presentada la denuncia fue "por una elemental medida de sentido común, porque podría haber interferido la investigación policial".

Felipe Alcaraz, presidente del Partido Comunista de Andalucía (PCA) y parlamentario andaluz por Izquierda Unida, anunció tras el debate parlamentario que presentará ante el juez una carta anónima recibida en la sede de su coalición en la que se relata de forma pormenorizada, cómo se cometió el robo en las citadas dependencias. Según el anónimo, el responsable del robo fue un conductor interino del Servicio Andaluz de Salud (SAS), del que se cita su domicilio, y al que asegura la carta "le prometieron ciertas cosas porque iban a por algo muy importante".