La reducción del déficit corriente en febrero reafirma la desaceleración de la economía

El déficit por cuenta corriente acumulado en los dos primeros meses del año ascendió a 1.671 millones de dólares, según los datos del resgistro de caja del Banco de España, 93 millones de dólares menos que hace un año. El descenso en el déficit acumulado respecto al mismo período del año anterior es la primera vez que ocurre desde que se inició el proceso de recuperación de la actividad y puede representar, en opinión de expertos del banco emisor, "el primer indicio serio de que la economía española se está desacelerando a un ritmo que merezca la pena ser considerado como tal".

Los datos hechos públicos ayer por el Banco de España sobre el registro de caja con el exterior y la variación de reservas muestran nuevas tendencias que, si se consolidan en los próximos meses, pueden representar un cierto respiro a la situación de agravamiento de los desequilibrios exteriores que se venían registrando desde hace más de dos años.El déficit de la balanza comercial del pasado mes de febrero alcanzó la cifra de 1.678 millones de dólares, inferior a los 1.726 millones de dólares del mismo mes del año anterior. El valor de las importaciones totales se acercó a los 5.670 millones de dólares, con un crecimiento del 11,8% mientras que las exportaciones aumentaron por encima del 19%. La reducción de la distancia existente hasta ahora en la evolución del déficit comercial, ya que las exportaciones venían creciendo a ritmos inferiores al de las importaciones, y el relativo mejor comportamiento de la balanza de servicios y transferencias -a pesar de mantenerse un menor ritmo en los ingresos por turismo-, ha permitido que el déficit de la balanza por cuenta corriente en ese mes se situara en 911 millones de dólares, mientras que un año antes estaba en 1.079 millones de dólares.

La balanza de capital a largo plazo presenta en febrero un saldo similar al de un año antes, con un fuerte crecimiento de las entradas de capital como inversión directa bastante elevado y un descenso de las inversiones españolas en el exterior, y de préstamos españoles, de cierta consideración. El capital a corto plazo, normalmente especulativo, volvió a entrar en España en el último mes. La variación de reservas de divisas en febrero fue positiva en 198 millones de dólares, mientras que un año antes se había producido una salida de 632 millones.

Los datos de la balanza de pagos acumulada de los dos primeros meses del año no hacen sino reforzar la tendencia a una reducción de los desequilibrios exteriores. El déficit comercial asciende a 3.849 millones de dólares, con un incremento del 23% sobre el mismo periodo del año anterior, producto de un aumento de las importaciones del 25% y de un crecimiento de las exportaciones superior al 26%.

Déficit comercial

La reducción del déficit de la balanza por cuenta corriente en los dos primeros meses del año se debe, además de un menor crecimiento del ritmo del déficit comercial, a un aumento del saldo positivo tanto de la balanza de servicios como de las transferencias.

La balanza de capital a largo plazo, en los dos primeros meses del año, muestra una reducción superior a los 1.100 millones de dólares en relación al mismo período del año anterior, consecuencia sobre todo de la disminución de los créditos exteriores -por las limitaciones impuestas por la autoridad monetaria- y en menor medida de la inversión extranjera directa. Las reservas de divisas en los dos primeros meses han permanecido estables, ya que sólo han aumentado en 18 millones de dólares.

Las cifras del registro de caja del Banco de España, que contabilizan ingresos y pagos reales, contrastan en parte con los reflejados por la Dirección General de Aduanas, que tienen en cuenta los movimientos físicos de las mercancías. Según esta última estadística, el valor de los bienes importados hasta febrero supera los 13.000 millones de dólares, con un aumento del 20,8% respecto a un año antes, mientras que las importaciones crecieron a un ritmo inferior a la mitad hasta situarse en 7.822 millones de dólares. El déficit comercial habría aumentado un 41,3%.

En febrero, según las cifras de Aduanas, se ha producido una fuerte desaceleración de las importaciones de productos no energéticos (aumentando sólo un 4,8%), mientras que las ventas de productos españoles no energéticos registraron una caída del 0,1 %, lo que puede representar una desaceleración.