Tres educadores, sancionados por negarse a usar celdas de castigo en un colegio de Tenerife

Tres psicólogos educadores del centro convivencial de menores San Miguel de Santa Cruz de Tenerife han sido sancionados por la Dirección General de Servicios Sociales del Gobierno de Canarias con la suspensión de empleo y sueldo por un mes al negarse a utilizar las celdas de castigo que existen en el colegio.

Juan Carlos Rosales,. María del Mar García y Hermann Dait incumplieron una orden cursada por el director del centro, Abimael Clavijo, indicando que "ante la gravedad conductual y antisocial que presentan los alumnos que se relacionan [refiriéndose a seis jóvenes], ordeno que, al ser traídos por la policía, sean conducidos por los mismos hasta la celda, de donde sólo saldrán para hacer las comidas correspondientes".Los educadores se negaron a permitir el encierro de los jóvenes "porque las celdas son reducidos espacios de cinco metros cuadrados sin oxigenación, sin luz natural, una lámpara eléctrica estropeada, una colchoneta y un orinal. En el último año y medio, varios internos han intentado suicidarse reiteradamente dentro de las celdas".

El director del centro afirmó que las celdas de castigo permanecen cerradas desde 1984. "Sólo mantenemos una zona de aislamiento, que en alguna ocasión utilizamos por un período no superior a 24 horas con internos de conducta difícil".Según el director, el conflicto del centro ha sido propiciado por intereses laborales, sin considerar al menor.

Los 13 profesores del centro han denunciado el caso ante el Tribunal Tutelar de Menores de Santa Cruz de Tenerife y el Diputado del Común (institución canaria homologable al Defensor del Pueblo). Los tres psicólogos sancionados cuentan con un informe de la Dirección Provincial de Trabajo en el que se denuncian las condiciones "infrahumanas" de las citadas celdas. El centro San Miguel acoge, entre otros, a niños internados por el Tribunal Titular de Menores.