La Comunidad Europea acepta que la Union Soviética se beneficie de los créditos del Banco del Este

El Consejo de Ministros de Finanzas de la CE aceptó ayer en Bruselas, de una manera informal, que la Unión Soviética pueda ser beneficiaria de los créditos del futuro Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD), para los países de Europa Central y del Este. Para evitar una concentración excesiva de financiaciones en la URSS, el total de créditos concedidos guardará proporción con su participación en el capital, que rondará entre el 6% y el 8% del total.También los doce dieron el visto bueno a una participación de la CE, y el Banco Europeo de Inversiones, conjuntamente, como accionistas del 6%. Esto evita que su presencia sea simbólica, pero impide que alcance el techo fijado para los países grandes, calculado en torno al 8,5%.

Esta cuota, válida para la RFA, Francia, el Reino Unido o Italia, será modificada al alza para Estados Unidos, que ha hecho saber que necesita ser el mayor accionista para que su contribución sea aprobada sin problemas en el Congreso norteamericano. España aportará el 3,5% del capital, estimado inicialmente en 1,3 billones de pesetas.

A pesar de los numerosos progresos en torno a la constitución del BERD, faltan todavía por resolver numerosos problemas de funcionamiento y de estatutos. Según fuentes comunitarias, hasta abril no estará decidida la configuración definitiva del nuevo banco.

Agricultura

Por otra parte, el Consejo de Ministros de Agricultura, reunido también ayer en Bruselas, aprobó el reglamento comunitario que regula los nuevos mecanismos de control de las ayudas a la exportación de productos agrícolas, informa Efecom.

Con el reglamento aprobado, la Comunidad Europea dispondrá a partir de ahora de nuevos mecanismos que garantizan la concesión de ayudas a la agricultura, a través del control que efectúan las administraciones nacionales de los Estados miembros, con apoyo financiero de la Comunidad Europea. Los ministros de Agricultura habían alcanzado ya un acuerdo político sobre este asunto en el mes de diciembre.

Coincidiendo con la reunión del Consejo de Ministros, cerca de 13.000 agricultores, según la policía, y 20.000 según los organizadores, se manifestaron en Estrasburgo contra la propuesta de precios agrícolas que discutían los titulares de los doce.

La manifestación estaba organizada por diversos sindicatos agrarios franceses y alemanes, y, contó con la participación de representantes españoles, portugueses, griegos e italianos, que recorrieron la ciudad con tractores y animales.

Paralelamente, otra manifestación similar de agricultores alemanes, holandeses, daneses y belgas se había organizado en Aquisgrán.

Los ministros celebraban ayer el primer debate en profundidad sobre los precios de garantía para la campaña 1990-91. El análisis se limitaba, sin embargo, a media docena de sectores, especialmente cereales y arroz, leche, frutas y hortalizas, grasas y carne vacuna, que han sido estudiados ya a nivel técnico por el Comité Especial de Agricultura. Las repercusiones de las medidas agromonetarias en algunos productos, como los cereales, por ejemplo, volverán a constituir el caballo de batalla de la larga negociación de precios.

Las delegaciones alemana y española contestan la propuesta comunitaria de desmantelamiento de un tercio de los montantes compensatorios monetarios positivos, pues ello se traduce en un descenso de los precios garantizados nacionales.