Las viviendas más modestas del Plan 18.000, en peligro

La construcción de las 4.188 viviendas más baratas del Plan 18.000 del Ayuntamiento de Madrid, destinadas a las familias económicamente más débiles, está en peligro. Las cooperativas, encargadas de la gestión de gran parte del plan, están rechazando a los solicitantes más modestos, según IU, ante la incapacidad de gestionar unas promociones cuyo precio final no cubriría los gastos de construcción. El Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) se ha ofrecido al Ayuntamiento para asumir estas viviendas.

Gran parte del Plan 18.000 está en el aire. A los problemas para liberar el suelo en las zonas donde se han de levantar las viviendas -especialmente de las previstas para 1991 y 1992- se une la incapacidad de las cooperativas para hacerse cargo de las 4.188 viviendas de la modalidad uno, destinadas a familias con sueldos inferiores a dos veces al salario mínimo interprofesional que, en la actualidad, es de 50.010 pesetas.Federico Martínez, uno de los responsables de la cooperativa de la Flor de Fuencarral afirma que no van a poder atender a un 80% de las 1.000 primeras solicitudes que han recibido, las de las familias menos solventes. "La modalidad uno es inviable porque hoy día no se puede construir con los precios de venta establecidos en ella [aproximádamente 54.000 pesetas el metro cuadrado]".

Salvar el Plan

Miguel Ángel Pascual, gerente del Ivima, considera que es necesaria la intervención de la Comunidad, "para salvar el Plan 18.000", afirma. "Hemos ofrecido al Ayuntamiento que nos ceda el suelo donde están previstas las viviendas de la modalidad uno para encargarnos de la promoción". Según Pascual, la oferta incluye también a las viviendas de la modalidad dos -destinadas a familias con ingresos inferiores a 2,5 veces el salario mínimo interprofesional- que quedaran sin adjudicar a las cooperativas por falta de ofertas.Pascual afirma que con el precio del módulo de construcción de vivienda de protección oficial establecido -68.000 pesetas el metro cuadrado- las cooperativas no pueden encargarse de la promoción de las modalidades uno y dos.

José Luis Garro, coordinador de los temas urbanísticos del Ayuntamiento de Madrid, baraja la posibilidad de traspasar la promoción al Ivima aunque, considera, hay que esperar hasta que finalice el plazo de presentación de ofertas por parte de la cooperativas.

Francisco Herrera, portavoz de Izquierda Unida, no está de acuerdo con que el Ivima asuma el Plan. "En el pleno monográfico de vivienda de diciembre se acordó instar a la Comunidad de Madrid a que promoviera anualmente la construcción de 5.000 viviendas en suelo cedido por el Ayuntamiento", explica. "Ese suelo no puede salir ahora del Plan 18.000".

El Plan 18.000 prevé la construcción de 18.180 viviendas en tres años de las que 3.622 serán construidas por la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV). El resto se reparte en tres modalidades, según el nivel de ingresos de los solicitantes: 4.188 para la modalidad uno, 3.613 para la dos y 6.767 para la tres. Este última está destinada a personas con ingresos inferiores a cuatro veces el salario mínimo interprofesional.