_
_
_
_
_
VÉRTIGO EN EL ESTE

El Gobierno de Albania declara el estado de emergencia

El Gobierno albanés ha decretado el estado de emergencia en todo el país, informó ayer la agencia oficial de noticias de Yugoslavia, Tanjug. La decisión de las autoridades de Tirana se produce después de que se acusara a los albaneses exiliados de fomentar la agitación en el último Estado europeo con un régimen estalinista. "La Albania socialista no permitirá que nadie la desestabilice", afirmaba el pasado día 10 el periódico del Partido Comunista Albanés, Zeri i Popullit.

Más información
El Gobierno rumano coloca fuera de la ley al partido comunista

El presidente Ramiz Alia se ha visto obligado "a tomar medidas excepcionales para controlar la situación en el país", añade Tanjug,' que cita "fuentes solventes".Por su parte, el secretario del Comité Central del Partido Comunista albanés Foto Cami calificó ante la televisión estas informaciones de "una maraña de mentiras" de aquellos "que desean ver en Albania los mismos acontecimientos que en el resto de los países del Este".

El jueves pasado, el diario de Belgrado Politika informaba que el Gobierno de Tirana había tomado medidas de excepción en la ciudad de Shkoder. Añadía que también se han reforzado los controles policiales en los pueblos cercanos al lago de Shkodër, situado en el norte delpaís, a 30 kilómetros de Yugoslavia.

Intervención extranjera

"Las prescripciones del capitalismo, de la perestroika y del reformismo burgués son inaceptables para nuestro pueblo y para nuestro partido", destacaba Zeri i Popullit en un amplio y jugoso editorial, consagrado a celebrar el 44º aniversario de la fundación de la República. "Inspirados por los cambios que se han producido en Europa del Este, los medios reaccionarios y los jefes de los clanes de la Iglesia ortodoxa griega 'han creido que ha llegado la hora de intervenir en Albania", añadía.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Los albaneses de la etnia griega que en los últimos meses han logrado escaparse del país aseguran que Albania se ha convertido en una "enorme cárcel", y narraron casos en que los hijos espían a los padres y la policía obliga a los paseantes a golpear a los prisioneros en la calle.

En la Prensa yugoslava, donde desde hace varias semanas se especula con el futuro de Albania, han aparecido informaciones sobre manifestaciones de la juventud de Shkoder en demanda de cambios políticos.

Según Politika, cinco de los organizadores de las protestas fueron ejecutados.

Las autoridades comunistas aseguran que la agitación viene de los albaneses que abandonaron el país y pretenden reinstaurar la monarquía en la persona del hijo del rey Zog. Éste fue derrocado por las tropas italianas y alemanas en 1939. Su hijo Leka, que vive en Suráfrica ha anunciado que su gobierno en el exilio está preparándose para interferir en las ondas de radio albanesas y dar la señal de insurrección contra la dictadura.

Ayer el telediario de la televisión albanesa de media tarde abrió sus informaciones sobre una visita oficial de Alia fuera de la capital, pero no al lugar donde eventualmente se están produciendo los disturbios. La televisión mostró imágenes de la ciudad de Durres y una panorámica con trenes de mercancías, mientras el locutor mencionaba el nombre del anterior líder, albanés, Enver Hoxha. Un traductor yugoslavo que visionó las imágenes recibidas desde Tirana dijo que el telediario no mencionó los desórdenes.

Desde que en 1985 falleció Enver Hoxha, fundador del partido comunista y responsable del aislamiento internacional de Albania, los analistas políticos han esperado una apertura del régimen estalinista que hasta el momento no se ha producido más que en tímidos gestos, que apenas resultaron perceptibles. De hecho, Mijail Gorbachov, es para el sustituto de Hoxha, Ramiz Alia, lo que para su predecesor fue Nikita Jruchov. Tirana rompió sus relaciones con Moscú en 1961. En sus discursos a la nación, Alia ha reiterado que la perestroika ha sumergido a la Unión Soviética y a sus seguidores en un caos "del que es dificil que algo bueno emerja".

El ministro de Exteriores albanés, Reís Malile, durante la visita que, en noviembre pasado, realizó a España -las relaciones diplomáticas entre los dos paises se restablecieron en 1986-, hizo hincapié en que Albania no tenía "nada que ver" con los cambios que se producen en el Este.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_