La metamorfosis de Broadway
La especulación amenaza el corazón teatral de Nueva York
La calle 42, la arteria que corta horizontalmente la isla de Manhattan, y Times Square, el cruce de la Séptima Avenida y Broadway, la plaza mágica que da forma al alma de Nueva York, están cambiando día a día. La especulación inmobiliaria y el afán de lucro de los dueños del suelo están provocando una metamorfosis constante en el distrito teatral de, la metrópoli. El Times Square del espectáculo, las luces y la magia se está convirtiendo en un centro hotelero y comercial. El viejo Times Square de cabarés, neón y marineros besando a bellas enfermeras ha pasado a la historia.
El centro del show-business mundial no se ha salvado de la especulación. Desde hace 10 años los planes de remodelación de la zona de Times Square, el punto donde la Séptima Avenida se cruza con Broadway, han estado aparcados en algún despacho del City Hall. A. la puerta de la década de los noventa todo parece indicar que la zona está ya demasiado degradada y alejada del espíritu que la hizo famosa en el mundo entero. Broadway, uno de los centros cuIturales más importantes del mundo. se está ahogando en el cemento y parece como si nadie le fuera a echar una mano.
Delincuencia
El pasado año, por ejemplo, se cometíeron 2.246 delitos en la calle 42, entre la Séptima y la Octava avenidas, la zona de la gran terminal de autobuses, La mayor parte de aquellos crímenes fueron asesinatos, violaciones, robos y asaltos.
Además de la ineficacia policial para calmar la zona, las soluciones urbanísticas propuestas por el Ayuntamiento para salvar Times Square y el área de Broadway comprendida entre las calles 42 y 50, y entre la Sexta y la Octava avenidas, tampoco se han desarrollado por falta de dinero.
Edwarel Koch, el ya prácticamente ex alcalde de la Gran Manzana, fijó en 2.500 millones de dólares un plan de recuperación urbanístico y arquitectónico que no llegó a realizarse. Mientras tanto, los permisos de construcción indiscriminada. se han estado otorgando sin cesar.
Lo que fueron teatros increíbles son ahora tiendas de pornografía o tiendas de productos electrónicos. Entre todos los proyectos ya realizados, como el del enorme Marriot Marquis Hotel, en Times Square, o los proyectos aún por realizar, destaca el Times Square Center, que pretende construir en 1990 la Park Tower Realty Corporation.
Se trata de cuatro enormes edificios ultramodernos concebidos por John Burguee Arquitects y Phillip Johnson como sede de oficinas comerciales. El conjunto es increíble. Las torres tienen diferentes alturas y están localizadas en diferentes lugares, pero está claro que pertenecen a un mismo proyecto. "Es como un pastel del que se han cortado varios pedazos", ha escrito Paul Goldberger, un espec:talista en arquitectura, para definir el complejo de Burguee.
El Times Square Center tendrá una rentabilidad increíble, ya que se halla situado en el Midtown, una zona donde los Impuestos son mucho más bajos que en algunas áreas deA Uptown o del propio Wall Strect. Los alquileres del Times Square Center serán astronómicos, y sus propietarios, los landlords, multiplicarán sus fortunas y verán saciada su avaricia.
Sin embargo, son rnuchos los arqui,tectos, especialistas en urbanismo y ciudadanos que han criticado este proyecto porque consideran que no contribuye a rescatar el espíritu mágico de Broadway, a pesar de que Koch declarara que el proyecto de Burguee "mantiene el vibrante y ecléctico espíritu de Times Square". Koch perdió las elecciones municipales de Nueva York el pasado mes de noviembre y entregará el mando a su sucesor, David Dinkins, a primeros de año.
Vincent Tese, presidente del New York State Urban Development, explicó con precisión lo que ocurre en esa. zona de Manhattan. "Las torres [del proyecto de Burguee] pueden ser grandes y feas, pero los números salen, y lo importante para los constructores es el aspecto económico, no el tamaño".
Es esta mentalidad la que quizá ha cambiado Times Square. A finales de 1990 otros tres hoteles estarán en funcionamiento alrededor del Marriot, cuyo éxito comercíal ha animado a otros hoteleros a instalarse en la zona. Hoy las grúas, los obreros y los camiones entorpecenla entrada del Broadway Theatre, donde se representa Les rniserables. Lo mismo ocurre en el Booth, el Shubert, el Majestic, el Winter Garden, el Cort y en los teatros del off Broadway como el Douglas Falrbanks Theatre y en cabarés como el Algonquin, de la calle 44.
La avaricia está levantando sobre estos teatros el esqueleto de los futuros Holiday Inn Crowne Plaza -46 pisos-, Embassy Suites y Hutel Macklowe -2.000 nuevas plazas hoteleras-, mientras otra cadena acaba de anunciar que tiene previsto iniciar la construcción del Ramada Renaissance Hotel, en Broadway con la calle 48.
"Times Square se ha convertido en el destino preferido de nueve de cada 10 turistas que llegan a Nueva York, pero ahora ya son muy pocos los que preguntan cuál es el mejor espectáculo de Broadway; ahora lo primero que hacen es preguntar cuál esel mejor hoteV, explica Richard M. Rosan, uno de los vicepresidentes de Silverstein Propertles, la constructora de las Embassy Suites, en la calle 47 y la Séptima Avenida.
Babelia
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