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La administración de la gloria

Stig Ranmel, director de la. Fundación Nobel: "Cela abrirá la mente de la literatura europea"

Juan Cruz

Al Nobel español Camilo José Cela se le unirán esta tarde los restantes premios Nobel que este año han sido galardonados por las distintas instituciones suecas, sobre cuya responsabilidad recae la decisión de administrar la gloria internacional de las letras, la medicina, la química, la física, la economía y la paz, entre otras. Detrás del acto solemne de esta tarde hay un hombre que permanece en la sombra: el director ejecutivo de la Fundación Nobel, el historiador periodista y diplomático Stig Ranmel. En su despacho de Estocolmo, rodeado de recuerdos del fundador de esta institución, Alfred Nobel, Stig Ranmel contó ayer a EL PAÍS cuál es el papel de esta institución en la administración de la gloria.

ENVIADO ESPECIALStig Ranmel es un diplomático elegante, barón en su país, laureado con la Cruz de Isabel la Católica, poseedor de un lenguaje exacto y reflexivo, que combina su capacidad diplomática con la profundidad histórica. Para él, la fundación es meramente el cuerpo central en el que se basan las distintas entidades académicas que distribuyen los premios, y como tal no tiene ninguna influencia sobre ellos. "Nuestra misión principal es la de dotar de dinero a las distintas academias o instituciones para que puedan desarrollar con independencia sus trabajos de investigación. Eso no nos da ninguna posibilidad de interferencia".El poderío que tiene este investigador de la historia no le hace creerse "el rey de la Fundación Nobel". "El consejo de la fundación está encargado solamente de proponer una política, y en ese sentido soy más bien el primer ministro". Ranmel ha sido director ejecutivo de la fundación durante 18 años.

La institución Nobel cumple 90 años en 1991, y con ese motivo se reunirán en Estocolmo unos 200 galardonados, que ofrecerán conferencias y participarán en acontecimientos que ya prepara la fundación. Entre esos 200 galardonados, Ranmel podrá ver al que hizo más feliz: el Nobel soviético Solzhenitsin, "que cuando estuvo sentado en esa silla donde usted me entrevista ahora me pareció un hombre sobresaliente, alguien que pasó por el sufrimiento, en el Gulag, y salió de allí con la mente intacta". El premio de Cela le parece un acontecimiento muy importante, y (debo decir que, aunque esto no ocurre siempre, yo lo leí antes de obtener el Nobel. No me parece sólo un gran escritor, sino un hombre que puede contribuir a abrir la mente de la literatura europea".

Como escritor, Ranmel quisiera ser un hombre dividido para poder dedicarse más directamente a su trabajo, "pero debo seguir cumpliendo con mis obligaciones al frente de la Fundación Nobel porque de este modo cumplo con otra de las ideas que la inspiran: Alfred Nobel fue un internacionalista y aspiro a que mi país lo sea siempre".

Los padrinos de Cela

El Nobel español tendrá hoy dos padrinos excepcionales en la fiesta del Nobel: Lars Gillensten, presidente de la Fundación Nobel, y Knut Ahnuld, miembro de la Academia, traductor del escri tor gallego al sueco y el hombre que desde 1978 impulsó su candidatura. El acto se divide en dos partes. En la primera, el rey de Suecia entregará a los Nobel la medalla que los acredita como tales, y en la segunda habrá discursos y baile.Un aspecto distinto a esa solemnidad anual tiene el discurso del Nobel, que se produjo el viernes en la Academia y que concentra desde hace unos años una nueva modalidad: el coloquio. En este caso fue un coloquio escaso después de un discurso largo que Cela pronunció con la exactitud habitual en él y cuyo texto corresponda a su larga meditación sobre la lengua, contenida ya en textos suyos que se titularon Teoría del lenguaje y Pensamiento, literatura y libertad. En ellos se concentra el espíritu de fabulador que tiene este defensor de las palabras. Ambos elementos fueron interconectados y reelaborados por el Nobel español. Preguntado anoche sobre la concatenación de estos discursos, el Nobel español explicó que "es práctica habitual que cuando uno tiene que hablar de algo lo haga con las ideas que siempre tuvo".

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