Trabajo sanciona a Renfe con 32 millones de pesetas por fraude en la contratación

La Inspección de Trabajo ha sancionado a Renfe con multas por un total de 32 millones de pesetas por fraude a la Seguridad Social en la contratación de asalariados. Según el dictamen del Ministerio de Trabajo, la empresa ha contratado desde el 1 de enero de 1988 a 431 empleados temporales con un sueldo por debajo de lo que marca el convenio vigente, lo que considera inconstitucional. Además se le acusa de utilizar indebidamente 5,9 millones de pesetas que la empresa recibió de la Administración como ayudas de fomento del empleo.

La compañía ferroviaria, a tenor de lo que refleja el documento oficial, ha obrado de manera contraria a los derechos constitucionales, pues ha dejado de abonar 17,4 millones de pesetas a sus contratados temporales frente a los trabajadores fijos (a pesar de que ambos colectivos tienen las mismas responsabilidades), lo que "implica una grave discriminación".El acta de infracción, que se hizo pública el pasado 1 de diciembre, indica también que Renfe ha disfrutado de manera indebida de las bonificaciones que la Administración da a las empresas sujetas a las medidas de fomento de empleo. El fraude asciende a 5,9 millones de pesetas, cantidad que deberá devolver a la Seguridad Social.

El inspector de Trabajo acusa también a la compañía ferroviaria de incumplir el artículo 42 de la ley básica de Empleo, que obliga a las empresas a acudir previamente a las oficinas de empleo para solicitar a los trabajadores que necesiten y registrar en ellas los contratos.

Por todo ello, la inspección ha propuesto una multa de 15 millones de pesetas, que es la máxima sanción que se puede poner en materia laboral, y que debe ser ratificada por el Consejo de Ministros. Además de ella, otras dos de 10 millones y de siete millones de pesetas, que deben ser ratificadas por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.

Este dictamen es el resultado de una denuncia que el sindicato federal ferroviario de la Confederación General del Trabajo (CGT) formuló contra la empresa Renfe en julio de este año. En ella, el sindicato anarquista daba a conocer a la Dirección Provincial de Trabajo de Madrid que la compañía ferroviaria estaba incumpliendo normas laborales y de seguridad social de forma reiterada.

Denuncia de la CGT

Otra de las reivindicaciones de esta organización es que Renfe notifique puntualmente al comité de empresa el establecimiento de los contratos, tal y como marca el Estatuto de los Trabajadores, lo que no ha cumplido hasta el momento. La Confederación General de Trabajadores viene denunciando desde junio de 1988 que la empresa tiene por costumbre saltarse esta normativa laboral, lo que impide el libre acceso a la información a los representantes de los trabajadores dentro de la empresa y permite la contratación de empleados sin control alguno. La Inspección de Trabajo ha conminado en reiteradas ocasiones a Renfe a que cumpla tales requisitos.La negativa de la empresa obligó al inspector de Trabajo a visitar la dirección de administración de personal el pasado 24 de octubre, donde pudo comprobar que Renfe no había cumplido con el requerimiento de pagar a los contratados eventuales las cantidades que se les debía desde enero de 1988.

La empresa pública ha estado contratando a estos trabajadores durante dos años en las épocas punta (Semana Santa, verano...) fundamentalmente como factores o informadores. Ninguno de los 431 afectados recibió el mismo sueldo que sus compañeros fijos, aunque desempeñaron las mismas funciones, mientras que Renfe sí se beneficiaba de las bonificaciones por fomento de empleo.