_
_
_
_
ARDE CENTROAMÉRICA

Juan Pablo II condena la "execrable violencia" y llama a la concordia

Juan Arias

Juan Pablo II rompió ayer el silencio del Vaticano sobre la matanza de seis sacerdotes jesuitas y dos mujeres en un atentado en El Salvador con una dura condena de la "execrable violencia" y una llamada a la "responsabilidad y a la concordia".

El Papa expresó su repulsa con dos telegramas personales enviados al arzobispo de El Salvador, Arturo Rivera Damas -otra de las personalidades condenadas a muerte por los escuadrones asesinos de la extrema derecha-, y al superior general de los jesuitas, Hans-Peter Kolvenvak. Juan Pablo 11 asegura a este último que participa "del dolor de la entera Compañía de Jesús y de las familias de las víctimas" y comparte su "inmensa pena por el horrible asesinato". El Pontífice hace votos para que el sacrificio no sea en vano y se convierta en "semilla de amor fraterno y de concordia por el martirizado país de El Salvador".En su misiva al arzobispo de El Salvador, sucesor de Oscar Romero (asesinado en 1980), por cuya vida se teme ahora en Roma, el Papa manifiesta su "enérgica, reprobación por las acciones contra las vidas de las personas" y hace votos para que el sacrificio impulse a todos a rechazar la, violencia y respetar la vida de los hermanos".

El Papa no hace referencia alguna en sus telegramas a la personalidad de los jesuitas martirizados, bien conocidos por haber sido los paladines de la teología de la liberación en El Salvador y por estar directamente empeñados en el dificil diálogo entre la guerrilla y el Ejército.

Hasta el último momento se esperó que el Papa, que vive a unos pasos de la casa generalicia de los jesuitas, se trasladara para compartir con la cúpula de la orden su dolor y rezar juntos, o bien. que les hubiese convocado a su capilla vaticana, dado que es conocida la predilección del papa Wojtyla por los gestos simbólicos.

Mientras, en la casa generalicia de Roma lucha entre la vida y la muerte el ex general Pedro Arrupe con el cual el Papa tuvo relaciones muy difíciles, hasta el punto de que, en la práctica, le obligó a retirarse.

Misa en Roma

El lunes, el general jesuita Kolvenvak celebrará una misa por los jesuitas asesinados en la preciosa Iglesia romana del Gesù. Se espera que el Vaticano envíe una representación.

Se especulaba ayer en el Vaticano con la posibilidad de que Juan Pablo II, como hizo con Líbano, expresase su deseo de hacer un viaje rápido a El Salvador, para demostrar con su presencia el! apoyo a cuantos siguen aún amenazados de muerte, que son, como se sabe muy bien, cuantos se esfuerzan por poner en práctica la teología de la liberación, al colocarse al lado de los humildes e indefensos.

Precisamente hace sólo unos meses, uno de los asesinados confió a un periodista de la RAI-TV: "Aquí se está preparando un baño de sangre. A nosotros no nos importa morir, ya que de lo contrario no seríamos buenos misioneros. Lo que más nos dolería es que nos expulsaran del país impidiéndonos así estar al lado de los que sufren y mueren injustamente".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_