Ostentórea
Sin ánimo alguno de reiniciar una acaso exagerada polémica, sirva esta carta para hacer constar que el término ostentórea aparecía ya en letra impresa (ignoro si por primera vez) en 1983: véasela la 19ª línea de la página 147 (dentro del libro III) en el primer volumen de la novela Herrumbrosas lanzas, cuyo autor es (nada más y nada menos) don Juan Benet.-
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