Una carga policial enturbia el sorteo de la 'mili'

La desproporcionada actuación de la policía, que cargó contra cientos de personas para impedir la protesta de un reducido grupo de objetores, enturbió ayer el sorteo anual de la mili, celebrado en la sede de la Capitanía General de Sevilla, en el que se decidió el destino de los 215.589 jóvenes que se incorporarán al servicio militar el año que viene. Alfonso Garrido Ávila, delegado del Gobierno en Andalucía y gobernador civil de Sevilla, reconoció implícitamente la dureza de la carga policial al admitir que "con las compañías de reserva no podemos", refiriéndose al grupo de antidisturbios llegado a la ciudad desde Linares con motivo del acto.Desde primeras horas de la mañana, unos 150 miembros del Cuerpo Nacional de Policía tomaron las inmediaciones de la plaza de España, donde se encuentra la Capitanía General de Sevilla y donde había sido convocada una manifestación en contra del reclutamiento forzoso. A los policías uniformados había que sumar los efectivos de la Policía Militar que custodiaban el edificio y los inspectores de paisano que merodeaban por la zona, reforzados todos ellos con un helicóptero y un botijo (camión dotado con cañones de agua a presión), que no llegó a entrar en acción.El hecho de que el año pasado dos objetores acreditados como periodistas lograran colarse en la sala donde tenía lugar el sorteo y desplegaran una pancarta hizo que ayer las medidas de seguridad fueran extremas, y el nerviosismo, patente entre los responsables del acto. Pasadas las doce de la mañana, y tras una paciente espera a que TVE realizara su conexión en directo, la junta del sorteo, presidida por el subsecretario del Ministerio de Defensa, Gustavo Suárez Pertierra, dio comienzo al mismo.El sevillano José Manuel Almarza, de 18 años, salió de entre el público, cuando se reclamó una mano inocente, para extraer del bombo una de las 366 bolas correspondientes a otros tantos días del año. El joven explicó posteriormente que había sido seleccionado por el centro de reclutamiento de Sevilla, junto con otros dos mozos, y que entre ellos se echaron a suertes cuál intervenía. Preguntado por su opinión sobre el servicio militar, se limitó a contestar que "no debería ser obligatorio, sino que cada uno lo hiciera o no, según su gusto".

La bola extraida fue la 0308, correspondiente al 3 de agosto. Esa fecha se hizo coincidir con el día de nacimiento del primer grupo de jóvenes de cada uno de los centros de reclutamiento, y a partir de ella, mediante un sistema informático, se agruparon correlativamente por ejércitos, regiones militares y llamamientos los 215.589 integrantes del reclutamiento forzoso. A los pocos minutos de sacada la bola empezaron a distribuirse las listas por provincias con los destinos de los integrantes de la quinta del 90.

Los resultados se proyectaron en una pantalla gigante, alquilada por el Ministerio de Defensa a una firma holandesa por siete millones de pesetas e instalada en la plaza de España, a la espalda de capitanía, para que los jóvenes allí congregados pudieran conocerlos de inmediato. Sin embargo, la atención de los congregados no estaba en la pantalla.

Después de que algunas decenas de antimilitaristas intentaran en varias ocasiones y sin éxito penetrar en la plaza, fuertemente custodiada por la policía, dos miembros del Movimiento de Objetores de Conciencia (MOC) consiguieron burlar la vigilancia y encaramarse a una grúa, de la que colgaron una gran pancarta con la palabra "insumisión".Periodistas golpeados

Sus compañeros, que siguieron desde abajo la acción de los miembros del MOC, rodearon la grúa, así como a varios agentes que se dirigieron a la zona para detener a los protagonistas de la acción. Acosados por los insumisos, que coreaban gritos en contra del servicio militar y de la actuación policial, los agentes hicieron uso de sus porras. Entre las primeras víctimas de sus golpes estuvieron varios de los informadores acreditados para el acontecimiento.

La policía, mediante una contundente carga, no sólo desalojó la plaza, donde además de manifestantes se encontraban centenares de jóvenes que habían acudido a presenciar el sorteo, sino que llegó a adentrarse por el sevillano parque de María Luisa en persecución de los objetores. Las carreras y golpes pillaron por sorpresa a un buen número de sevillanos que aprovechando la jornada festiva paseaban o patinaban por los jardines.

Dada la gravedad de los incidentes, el delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Garrido, dio instrucciones al jefe superior de Policía, Enrique Mora, de que abriese una investigación para aclarar las condiciones y circunstancias en que se produjo la actuación de los policías".

Por otra parte, grupos de objetores denunciaron que miembros de Protección Civil ayudaron a la policía a disolver a los manifestantes. Un miembro de Protección Civil fue obligado por sus superiores a esconder un llavero con el escudo franquista después de haber sido abucheado por los manifestantes. Además de los antimilitaristas, unas 30 mujeres de oficiales de la escala especial del Ejército aprovecharon el sorteo para manifestarse en defensa de sus reivindicaciones.Regiones

Los mozos sorteados en Sevilla tuvieron los siguientes destinos. Los incluidos en el Ejército de Tierra serán enviados a las siguientes regiones militares: Centro (Madrid, Extremadura, Toledo, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara, Segovia y Ávila), Sur (Andalucía), Levante (Comunidad Valenciana, Murcia y Albacete), Pirenaica Oriental (Cataluña y Aragón), Pirenaica Occidental (País Vasco, Navarra, Cantabria, La Rioja, Burgos y Soria), Noroeste (Galicia, Asturias, León, Zamora, Salamanca, Valladolid y Palencia), Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla. Los mozos que han quedado adscritos al Ejército del Aire les corresponde los siguientes destinos: Primera Región (Madrid y zona centro), Segunda (Sevilla y zona sur) y Tercera (Zaragoza y zona norte), más Canarias. En cuanto a la Armada, los mozos serán enviados a las siguientes zonas: Cantábrico (Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, La Rioja, Navarra y Burgos), Estrecho (Andalucía y Badajoz), Mediterráneo (Cataluña, Comunidad Valenciana, Baleares, Murcia y Albacete) y Canarias; más la jurisdicción central (León, Zamora, Salamanca, Valladolid, Palencia, Cáceres, Toledo, Madrid, Guadalajara, Cuenca, Ciudad Real, Segovia, Ávila y Aragón).