Robo de varias pinturas de Picasso en el chalé que la nieta del pintor tiene en Cannes

Varios cuadros de Picasso, dos telas de Matisse y un busto obra de Rodin fueron robados el domingo en la residencia de Cannes de Marina Picasso, nieta del pintor español Aunque el número exacto de obras de Picasso, que integran el botín se desconoce, se sabe que los ladrones se llevaron cerca de 15 cuadros en total, entre los que hay también obras de pintores del siglo XIX. El valor de las telas desaparecidas se calcula en unos 2.000 millones de pesetas.

El robo se produjo entre las 7. 10 y las 7.5 0 del domingo en el chalé Pavillon de Flore, perteneciente a la nieta de Picasso situado en la zona residencial Baja California, de Cannes. La casa, una construcción de dos pisos de principios de siglo, rodeada de una verja alta, se encontraba desierta, ya que el guardián había salido para efectuar unas compras, y Marina Picasso estaba pasando el fin de semana en Megeve, en la región alpina de la Alta Saboya.Los ladrones actuaron con suma celeridad aprovechando la ausencia del guardián, que estuvo fuera de la casa apenas una hora. Esta circunstancia indica, según la policía, que los asaltantes conocían perfectamente el lugar y los hábitos de los ocupantes de la vivienda.

Para vigilar los tesoros artísticos que guardaba en su interior, el chalé cuenta también con cinco perros, a los que nadie oyó ladrar el domingo, y con un sistema de alarma que, al parecer, no estaba conectado.

La policía judicial de Niza, encargada de la investigación, tomó ayer declaración a Marina Picasso, que se encontraba muy afectada por el robo y se negó a revelar a los periodistas el detalle exacto de las obras de arte desaparecidas. Como siempre ocurre en estos casos en que los cuadros no pueden venderse en el mercado del arte, la policía considera dos hipótesis: robo a cargo de profesionales por cuenta de un coleccionista o para negociar con las compañías de seguros un rescate.

Marina es hija de Emiliènne, primera esposa de Paul, hijo a su vez de Picasso y de su primera mujer, Olga Kokhlova. Los cuadros robados pertenecen a la herencia del pintor malagueño, que Marina y su hermanastro Bernard compartieron con Jacqueline, la última esposa de Picasso, y con los tres hijos que el artista tuvo fuera de sus matrimonios: Maya, Claude y Paloma.

La herencia

Repartida en 1976, tres años después de la muerte del, artista, la herencia de Picasso estaba integrada por 15.000 cuadros suyos y de otros pintores, con un valor aproximado de 100.000 millones de pesetas.

Marina Picsso fue la primera que eligió entre la herencia de su abuelo despúes del Estado francés. Francia se quedó con la mayor parte de la herencia, cómo pago de los derechos de sucesión de los familiares del autor del Guernica, que negociaron durante cinco años un acuerdo con las autoridades francesas.

La comisión interministerial encargada de las negociaciones pudo elegir entre el inmenso legado 228 pinturas, 149 esculturas, 1.495 dibujos, 1.622 grabados y 85 cerámicas, que forman la obra de Picasso expuesta permanentemente en el museo parisiense que lleva su nombre.

[La colección de Marina Picasso estaba integrada en principio por 60 pinturas, 200 dibujos, 40 esculturas y 10 cerámicas. La dueña decidió poner a la venta una parte de su colección y donar los beneficios una fundación de niños subnormales creada por ella.]

Unas horas antes del asalto al chalé de Marina Picasso se produjo otro robo de obras de arte en otra vivienda de Cannes, sin que se sepa si ambos hechos están relacionados. El botín de este segundo robo, ocurrido en el castillo del empresario Jean-François de Chambrun, está constituido por antigüedadades cuyo valor se eleva a varios millones de francos, aunque entre lo sustraído no hay obras de firmas conocidas.