_
_
_
_
_
CIENCIA

La energía solar fotovoltaica puede cubrir el 20% de las necesidades eléctricas de España en el año 2000

España podría llegar a cubrir el 20% de sus necesidades de electricidad con la energía solar fotovoltaica a partir del año 2000, piensan algunos expertos españoles y extranjeros, que no entienden cómo la investigación y aplicación de este tipo de energía se encuentran prácticamente paralizadas en nuestro país. Mientras tanto, el aumento del rendimiento conseguido en las células solares las hace crecientemente competitivas, especialmente si se tiene en cuenta el coste social y ecológico de otros tipos de energía, para su uso en centrales conectadas directamente a la red eléctrica.

España y el sur de Italia constituyen, junto a extensas zonas de Estados Unidos, las áreas del mundo desarrollado de mayor aprovechamiento potencial para la conversión directa de la energía solar en electricidad a través de células fotovoltaicas, explicó John Maycock, que fue director del programa de energía solar de la Administración de Carter en Estados Unidos. Maycock participó el jueves y el viernes de esta semana, junto a otros expertos, en las jornadas sobre Límites físicos de la conversión fotovoltaica, que ha organizado el Instituto de Energía Solar, de la Universidad Politécnica de Madrid, en la Fundación Ramón Areces. Las conclusiones de las jornadas apuntan a que el límite superior de rendimiento en células solares (de silicio y de arseniuro de galio en su mayor parte) es del 85%, aunque en la práctica se espera llegar sólo al 50%.Richard Swanson, de la Universidad de Stanford, cuyo equipo ha conseguido rendimientos en torno al 35% en células solares, explicó que en Estados Unidos las empresas eléctricas se están empleando a fondo en el desarrollo de este tipo de energia. En áreas seleccionadas, como la ciudad de Los Ángeles, en California, en 1995 la energía eléctrica para las horas pico (que coincide con el uso del aire acondicionado) procederá de centrales solares.

Mientras tanto, en España, la situación es de abandono. Los representantes de la Administración española (Secretaría General de la Energía y Secretaría de Estado de Universidades e Investigación) tuvieron que reconocer la falta de cauces para estimular la investigación en energía solar, que no ha sido considerada prioridad científica y no figura en el Plan Nacional de Investigación. Esta tendencia ha sido provocada por el descenso de los precios del petróleo en esta década, y es común en gran parte a la Comunidad Europea. Las empresas eléctricas españolas, aunque trabajan en el desarrollo de las energías renovables, aplican un criterio estrictamente económico -se puso de relieve el viernes- cuando se trata de considerarlas como fuentes alternativas a las actuales.

Alto rendimiento

Antonio Luque, director del Instituto de Energía Solar, cuyo grupo de investigación ha obtenido las células solares de mayor rendimiento de Europa (en torno al 20%), se quejó amargamente del abandono en que se encuentra la energía fotovoltaica frente a otras líneas de investigación, como la fusión nuclear, en las que la CE (y por tanto España) invierte grandes cantidades de dinero. "Yo afirmo", dijo, "que a medio plazo la energía fotovoltaica es una alternativa mucho más viable que la fusión nuclear". Luque defendió la necesidad de investigación propia que lleve a saltos cualitativos.El coste actual de la energía fotovoltaica tiene que ser cuatro veces menos para que sea directamente competitiva, explicó Maycock. Sin embargo, señaló él mismo, no se trata de competir, sino de complementar las actuales fuentes de energía (nuclear, petróleo, gas y carbón fundamentalmente), teniendo en cuenta sus ventajas (limpieza, seguridad, bajos costes de mantenimiento, y una fuente inagotable, que es el sol) frente a los llamados costes sociales (contaminación, accidentes nucleares, dependencia de otros países) de otras fuentes de energía.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_