La osadía de un joven alteró el dispositivo de seguridad

La Operación Horno, nombre que recibe el dispositivo policial encargado de la seguridad del rey Hassan II durante las horas que permanecerá en Sevilla, sólo se vio alterada ayer por un pequeño incidente en el aeropuerto, protagonizado por un joven marroquí, que quiso entregar una carta al monarca alauí cuando éste aún se encontraba en la pista de aterrizaje participando en la ceremonia de recepción.El rey Hassan no se dio cuenta del incidente, pero sí los miembros de la seguridad marroquí, que aplastaron prácticamente al joven, con apoyo de policías y guardias civiles españoles, y le ocultaron entre la masa de compatriotas, en su mayoría llegados a Sevilla en autocares procedentes de Málaga.

Todo ocurrió en cuestión de segundos y de forma muy rápida. La policía tenía constancia de que entre la masa de marroquíes, unos 600 aproximadamente, que componían el comité de recepción popular, había algunos que tenían intención de expresar quejas públicas a Hassan II e incluso se decidió que "algunos sospechosos" no pasaran a la pista de aterrizaje.

Sin embargo, cuando el monarca se dirigía a saludar a su colonia, un joven de Tetuán, de unos 28 años y cuya filiación no fue facilitada, intentó arrojarle una carta. El joven gritaba "Viva el Rey", pero a su vez reclamaba con energía unos terrenos expropiados a su familia.

Hubo tal nerviosismo que sólo pudieron ponerle una de las esposas, aunque quedó completamente inmovilizado en el suelo, reducido por el peso de los policías marroquíes y españoles. Cuando ya Hassan pasó al salón de ho nor del aeropuerto, pacificado el revuelo, el joven fue trasladado a unas dependencias donde quedó retenido en es pera de que fuera traducida la carta del árabe al castellano.Vigilancia

La Operación Horno se ha diseñado conjuntamente por las policías de ambos países, es,pecialmente en lo que se refiere a los cinturones de seguridad en torno al rey alauí. Marruecos ha enviado a Sevilla unos 85 policías, que sumados a los guardaespaldas de Hassan II sitúan en un centenar el equipo de seguridad marroquí. Los agentes del país vecino participaron conjuntamente ayer con los españoles en el control y paso de periodistas y en la vigilancia de cerca de la colonia marroquí concentrada en el aeropuerto.

Por parte española, se ha movilizado prácticamente a toda la plantilla policial de Sevilla, unos 500 hombres por cada turno de ocho hoias y a una Compañía de la Reserva General (antidisturbios) de Córdoba, que controla el hotel Alfonso XIII. La carretera entre el aeropuerto y el hotel la cubrieron conjuntamente guardias civiles y policías.