Mangada acusa a Sahagún de impedir el plan de Valdebernardo

El consejero de Política Territorial, Eduardo Mangada, acusó ayer al Ayuntamiento de Madrid de obstaculizar la construcción de 5.400 viviendas sociales en el polígono de Valdebernardo "con maniobras dilatorias". "El que quiera vivienda social que diga sí a Valdebernardo y que no invente rollos", sentenció ayer Mangada tras una entrevista con el tercer teniente de alcalde, el centrista José Luis Garro."Existe una discrepancia profunda", reconoció Mangada. "El Ayuntamiento ha propuesto que se cree una comisión para revisar el proceso expropiatorio. Nosotros, que hemos agotado todas las vías de entendimiento con la propiedad, interpretamos esto como una nueva piedra en el camino".

El consejero afirmó que hoy mismo remitirá una carta al alcalde, Agustín Rodríguez Sahagún, ofreciéndole un ultimátum: "O el Ayuntamiento da su visto bueno definitivo al proyecto en el primer pleno de septiembre, o la partida de: 3.700 millones que tenía reservada la Comunidad se perderá indefinidamente".

Aunque no quiso cargar las tintas, el centrista José Luis Garro defendió a toda costa la postura municipal: "El Gobierno regional ha actuado sin seguir el mandato del Ayuntamiento, que encomendó a la Comunidad el proyecto siempre y cuando se llegara a una expropiación convenida con los titulares de los terrenos. Esto no se ha hecho así, por lo que creemos necesario que se cree una comisión para reconducir el tema".

Mangada reaccionó airadamente ante esta propuesta con un "no rotundo". "Resulta que ahora quieren fiscalizar todo lo que ha hecho la Comunidad en estos meses", dijo. "Esto significa descalificar la institución a la que represento. Entendemos que el Ayuntamiento ve con recelo esta operación".

Sin embargo, José Luis Garro afirmó ayer que él es el primer interesado en sacar adelante las viviendas sociales. "Si no fuese posible un acuerdo entre la Comunidad y los propietarios, el Ayuntamiento está dispuesto a agotar todos los cauces legales que estén en su mano", dijo. Garro apuntó la posibilidad de que el, Ayuntamiento asuma en solitario la operación si no se llega a un acuerdo con la Comunidad.

El enfrentamiento entre las dos instituciones deja en el aire el futuro de una cuarta parte del programa de viviendas sociales de la Comunidad, que fue aprobado en la Asamblea. de Madrid con los votos a favor del CDS.

Otro proyecto que sigue en la cuerda floja es el intercambiador de transportes de Príncipe Pío. La Comunidad, que en principio exigía que la obra fuera financiada por el Consorcio del Pasillo Verde Ferroviario (Ayuntamiento y Renfe), se ha comprometido a negociar el tema con el Ministerio de Transportes.