Mano de hierro y guante de seda
El Ministerio de Exteriores quiere aumentar los centros de preparación en toda España para facilitar el ingreso en la carrera diplomática
Deben tener mano de hierro con guante de seda. Suman 633 en la actualidad. Una cifra insuficiente. El subsecretario del Ministerio de Asuntos Exteriores, Inocencio Arias, estima que, como mínimo, deberían ser 800. Son los funcionarios diplomáticos españoles. Varias decenas de jóvenes, que por primera vez han podido prepararse fuera de Madrid, opositan este verano para acceder a una de las 40 plazas de ingreso en la carrera diplomática que ofrece este año el Ministerio de Asuntos Exteriores.
De entre estos aspirantes a la carrera, 14 han recibido preparación en el Centro de Estudios Internacionales creado en diciembre de 1987 mediante un convenio suscrito entre el Ministerio de Asuntos Exteriores, la universidad de Barcelona (UB), a través de la Fundación Bosch i Gimpera, y la Caixa de Barcelona.Este convenío ha permitido, por vez primera, crear una unidad docente en una universidad, en este caso la de Barcelona, y descentralizar la oferta de formación de 1os aspirantes a diplomáticos, que hasta ahora tenían que acudir a Madrid en busca de los preparadores de oposiciones.
La matrícula en este centro, que tiene establecido un numerus clausus de 30 estudiantes, cuesta 250.000 pesetas por curso. La Caixa de Barcelona becó el curso pasado con 80.000 pesetas mensuales a 10 de los 22 jóvenes matriculados.
Licenciados en Derecho, Filología, Ciencias Políticas o Filosofía con edades comprendidas entre los 25 y los 32 años forman parte de este colectivo de aspiraciones heterogéneas. "Aunque la mayoría tiene vocación diplomát1ca, algunos pretenden ampliar sus conocimientos o prepararse para opositar en alguno de los organismos de la Comunidad Europea", señala Victoria Abellán, catedrática de Derecho Internacional Público de la UB y miembro de la dírección colegiada del Centro de Estudios Internacionales.
Jóvenes de Málaga, Burgos o las Baleares, además de los nacidos en Cataluña, se han desplazado hasta Barcelona para preparar su acceso a la carrera diplomática en el Centro de Estudios Internacionales, que pretende servir de plataforma para extender esta experiencia a otras universidades de España.
El subsecretario de Asuntos Exteriores, Inocencio Arias, ha expresado a este diario la intención del Ministerio de extender esta experiencia a otros centros de ensenanza superior para conseguir que aumente el número de aspirantes, a ingresar en la carrera diplomática, dado que en estos momentos el crecimiento del cuerpo diplomático es negativo, ya que se producen más bajas que ingresos. Arias señala que la universidad de Santiago de Compostela ha expresado su interés por acoger estudios de posgrado de esta naturaleza.Doscíentos temasMarta Gibert, de 27 años y licenciada en Derecho, disfruta de esta doble condición ofertada por el convenio. Comenzó a prepararse para las pruebas de ingreso en la carrera diplomática en 1985, en Madrid. Y, en febrero de 1988, formó parte de la primera promocíón de aspirantes del Centro de Estudios Internacionales.
"En Mádrid", indica, "me preparaba un especialista en oposiciones, que te obligaba a estudiar los temas y recitarlos. Este procedimiento te exigía dedicar", añade Gibert, "más horas de trabajo individual. Aquí tienes un catedrático por cada asignatura que te ayuda a centrar los temas".
La catedrática Victoria Abellán indica. que los aspirantes a ingresar en la carrera diplomátiea, además de dominar el frances y el inglés, han de preparar los temas de Historia Moderna y Contemporánea y de Derecho Civil o Internacional, entre otras materias. Y destaca la gran ventaja que ofrece el Centro de Estudios Internacionales: "Ofrece especialistas en cada materia". Abellán explica que, además de los profesores de la universidad de Barcelona, también colaboran docentes de la Autónoma de Barcelona, y de las universidades de Valencia y Sevilla.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores facilita al Centro de Estudios Internacionales la presencia de diplomáticos en activo que, por ejemplo, durante el curso que finalizó el pasado junio, impartieron hasta un total de 15 conferencias.
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