Sin pistas sobre el secuestro del empresario Martín Berrocal

La ausencia de pistas sobre la identidad de los seis individuos que el pasado miércoles secuestraron en Quito (Ecuador) al empresario taurino español Pablo Martín Berrocal, era ayer la tónica general en medios oficiales españoles y ecuatorianos. A media tarde, un portavoz de la embajada de España en Quito indicó que una de las hipótesis que barajan los medios de comunicación ecuatorianos es la de que el secuestro esté relacionado con grupos de intereses del sector taurino, mientras que la de la autoría de ETA o de un grupo armado ecuatoriano pierden consistencia.

El hermano del secuestrado, José. Luis Martín Berrocal, con quien comparte negocios Pablo, aseguró que la familia no sabe "absolutamente nada" del secuestro. "Las autoridades no nos dicen nada especial. La embajada lo único que ha hecho es ampliarnos un poco los detalles que dió el taxista" conductor del vehículo en el que viajaba Martín Berrocal cuando fue capturado.

La esposa del empresario, Blanca Paradela, que se halla realizando una excursión turística por la zona amazónica del país, desconoce el secuestro, del que aún no ha sido informada por deseo de los familiares del empresario, informa Efe.

El portavoz de la embajada española en Ecuador, que afirmó tajantemente que hasta el momento no existe petición alguna de dinero por parte de los autores, precisó que la prensa de aquel país hacía "conjeturas, pero sin aportar datos" sobre la posible relación del secuestro con mafias taurinas, directamente o a través de delincuentes comunes. "Los grupos armados ecuatorianos están inactivos desde hace bastante tiempo", dijo el portavoz, "y la hipótesis de ETA cada vez parece menos verosímil". El único grupo en actividad armada en Ecuador es Montoneros Patria Libre, después de que Alfaro vive, Carajo, acordara una tregua con el Gobierno recientemente.

"No apuntan a ETA"

El ministro de Exteriores español, Francisco Fernández Ordóñez, afirmó ayer que hasta ese momento no existía información del Gobierno ecuatoriano, cuyos responsables "están haciendo todos los esfuerzos posibles para localizar a los autores del hecho". Por su parte, un portavoz de Interior dijo a EL PAÍS que "los indicios no apuntan a ETA" y que no hay constancia de que el secuestrado estuviera en ninguna de las listas de personas extorsionadas o amenazadas por esa organización. La misma fuente indicó que se había pedido información a Interpol sobre su opinión sobre el caso. En el mismo sentido se manifestó el Ministerio de Gobierno ecuatoriano, un portavoz del cual precisó que la fuerzas de la Unidad de Investigaciones Especiales (UIES) de la policía. rastrean el paradero del empresario, informa Efe. A última hora del jueves, una nota del departamento consideraba autor del secuestro a ETA Militar, versión que se abandonó más tarde.